Un disparo del policía federal involucrado en el tiroteo con agentes judiciales ocurrido el martes pasado, fue el que alcanzó y le provocó la muerte a un empleado de mantenimiento de la UNAM, Raúl Rojas Nava, de 46 años.
Los peritajes en balística practicados por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), correspondientes a la averiguación previa abierta tras los hechos ocurridos en calles de la colonia Pueblo Nuevo de la delegación Magdalena Contreras, dieron ese resultado.
En conferencia de prensa, el subprocurador de Averiguaciones Previas Desconcentradas de la procuraduría capitalina, Luis Genaro Vásquez, informó que pese a que el disparo del agente federal, Venancio de los Santos Gómez, impactó primero el vehículo que conducía, alcanzó a herir letalmente a la víctima.
Por este motivo, dicho servidor público será consignado a un Juez de Paz Penal acusado del delito de homicidio culposo. Se trata de un delito no grave, por lo que el inculpado alcanza fianza, la cual ya solicitó.
De las investigaciones se desprende que el enfrentamiento ocurrió cuando un grupo de agentes judiciales que participaban en el operativo Transporte Seguro le marcó el alto al vehículo Seat en el que viajaba el agente federal, pues les pareció sospechoso que circulara en sentido contrario.
Sin embargo, Venancio de los Santos, en su declaración, afirma que a él fue a quien le pareció sospechosa la actitud de los judiciales, y ante el temor de que se tratara de un robo, decidió huir del lugar.
Lo anterior derivó en un tiroteo, en el que de acuerdo con lo señalado por el subprocurador, no se ha logrado establecer quién disparó primero. Agregó que por lo menos se efectuaron seis tiros.
Los dictámenes en balística permitieron establecer que la bala que mató al empleado de la UNAM, al perforar sus dos pulmones, fue una de calibre 9 milímetros de la marca Eagle, perteneciente al arma de algente federal, ya que los judiciales locales cuentan con balas de la marca Lagger.
'Lo anterior nos permite presumir que fue del arma de fuego del policía federal de donde provino el proyectil que se impactó en el cuerpo del occiso Raúl Rojas Nava', puntualizó el funcionario capitalino.
Se trató de un impacto, además, que no fue directo, ya que según las fotografías mostradas por el subprocurador, primero impactó un costado del mismo vehículo que conducía el agente federal y luego hizo blanco en la víctima.
Luis Genaro Vásquez añadió que aun no se ha podido establecer de qué arma provino otro disparo que también hizo blanco en la pierna de la víctima, pero hizo hincapié en que esta no fue la que privó de la vida a Nava, por lo que no resulta 'de relevancia' para el tema del homicidio.
Respecto de los 10 agentes de la Policía Judicial involucrados en el incidente, subrayó que tomando en cuenta al anterior evidencia, se resolvió dejarlos en libertad bajo reservas de ley, por lo que se refiere al tema del homicidio.
Se trata de los policías Mario Sánchez Jaramillo, Víctor Luna García, Juan Alberto Galdo Reséndiz, José Luis Olvera Sosa, Alfredo Tinajero López, Gilberto Cortés Cruz, Omar Alberto Pérez Medina, José de Jesús Villanueva Ramírez, Mario Alberto Ramírez Cárdenas y Faustino Pacheco Ordaz.
No obstante, Vásquez señaló que estos agentes continuarán suspendidos y bajo investigación por parte de la Fiscalía de Servidores Públicos, pues hay señalamientos de testigos de un presunto abuso de autoridad.
De igual forma, serán sometidos a un proceso disciplinario a cargo del área de Asuntos Internos, para verificar si actuaron conforme al protocolo señalado para el mencionado operativo.