Despide a su esposo. La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, permanece junto al féretro del ex presidente Néstor Kirchner.
Mandatarios latinoamericanos y una multitud de argentinos desfilaron el jueves frente al féretro del ex presidente Néstor Kirchner para rendirle un homenaje póstumo en la Casa de Gobierno.
Hasta tres mil personas por hora pasaron ante el ataúd en el velatorio en el Salón de los Patriotas Latinoamericanos, de la Casa de Gobierno.
Muchos otros seguidores del que fuera jefe del Partido Justicialista (PJ, peronista) y la principal figura política de la década, se agolparon en la Plaza de Mayo, esperando turno para entrar en la sede del Gobierno.
Durante el velatorio, varios gobernantes latinoamericanos arroparon con su afecto a la viuda, que en 2007 sucedió a su esposo en el poder y a quien los argentinos señalan como muy posible aspirante a una reelección en octubre de 2011.
Sin embargo, Kirchner era un importante apoyo para la actual mandataria que ahora deberá enfrentar en soledad el desafío de continuar su confrontacional estilo de Gobierno. Al mediodía, los gobernantes de Bolivia, Evo Morales; Chile, Sebastián Piñera; Uruguay, José Mujica, y Ecuador, Rafael Correa, la acompañaron. Por la noche fueron el presidente Hugo Chávez de Venezuela; Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil; Juan Manuel Santos de Colombia; y Fernando Lugo de Paraguay. Políticos de la oposición, dirigentes de derechos humanos, artistas y Diego Maradona, también dieron su adiós al líder político, que muchos creen era el que desde la sombra ejercía el poder.
Kirchner, fallecido en la víspera por un paro cardiaco, será velado hasta el viernes. Luego sus restos serán trasladados a su provincia natal de Santa Cruz, en el sur del país.
Una acongojada Fernández, vestida de negro y con anteojos oscuros, apoyó en varias ocasiones sus manos en el ataúd, cubierto con una bandera argentina. Estuvo acompañada por sus hijos Florencia y Máximo.
En ocasiones sonrió al público y hasta se acercó a saludarlos y aceptar obsequios que colocó sobre el ataúd. "Fuerza, Cristina" y "Viva Kirchner", gritaban los militantes, muchos de ellos quebrados en lágrimas.
"Ha muerto un justo, ha muerto un valiente. Llorarlo sería poco. Sigamos su ejemplo. Arriba Kirchner", afirmó Chávez, quien se fundió en un emotivo abrazo con la presidenta. En diálogo con periodistas al arribar al aeropuerto metropolitano, dijo que "venimos convocados por esa pasión argentina que fue Néstor Kirchner. Un unionista, surista (sic)".
Chávez, quien adelantó que podría permanecer en el país hasta el viernes para asistir al entierro, destacó a Kirchner "por su valentía para hablar muy claro, su olfato político".
"Es un hecho que lamentamos profundamente, no sólo en el plano personal sino como Gobierno y como país", aseguró por su parte Santos.
El presidente boliviano dijo a los periodistas que con la muerte de Kirchner, "Sudamérica quedó huérfana".
Piñera confió en que Fernández encuentre "fuerzas a fin de seguir liderando Argentina". Para Mujica la muerte de Kirchner "deja un vacío que la Argentina tendrá que llenar", mientras Lugo estimó que "el liderazgo del ex presidente Néstor Kirchner había traspasado las fronteras de Argentina".
Varios analistas afirmaron que Fernández se convierte ahora en la "candidata natural" del oficialismo. Pero en el caso de que decida buscar la reelección, tendrá que asegurarse el apoyo del sector peronista que respaldaba a su marido y no contaría con su asesoramiento para lidiar con la oposición.
"Ahora, seguramente la muerte de Kirchner mejorará la imagen de Cristina en la opinión pública, pero la realidad de la política no dará tregua", dijo el politólogo Rosendo Fraga.