Efectivos militares y agentes de la Agencia Estatal de Investigaciones tomaron desde las seis horas de este martes la corporación policiaca del municipio de Guadalupe, que forma parte de la zona metropolitana de Monterrey.
Los soldados están concentrando a todos los agentes a la sede de la Secretaría de Seguridad pública municipal para revisar sus armas.
Los militares han formado en el patio de la corporación a más de 150 policías y agentes de tráfico, y hasta el momento se desconoce si hay agentes detenidos.
En la mira
La presunta narcoalianza entre los cárteles del Golfo, Sinaloa y La Familia se ha atribuido el asesinato de 25 policías estatales en el estado, y amenazó con matar a otros 20.
Entre las víctimas destaca el titular de la corporación de Agualeguas, quien fue degollado junto con su hermano y abandonado en su patrulla. Los asesinos escribieron en el vehículo las siglas CDG (Cártel del Golfo).
Plaza caliente
En las últimas semanas, se ha visto un incremente de la violencia y la psicosis en la entidad. Durante el domingo por la madrugada, durante un concierto de Intocable, unos disparos generaron una estampida que dejó cinco muertos.
Según la psicóloga Vicenta Haddad, el sonido de los balazos transportó a la multitud de la diversión a la cruda realidad.
"La multitud estaba divirtiéndose, conectada con un grupo musical al que admira, seguramente ajenos a cualquier situación de violencia, queriendo olvidar toda la tensión que se ha estado viviendo, y con un sólo disparo los trajeron de golpe a la realidad", aseguró.
"Una multitud se caracteriza por ser dinámica, impulsiva y hasta cierto punto irritable y confrontativa; se deja guiar prácticamente de manera inconsciente. ¿Qué impulsos obedece? Aquí está precisamente el problema: depende de las circunstancias -incluso de si hay alcohol y drogas. Esto no significa que lo haya habido en algún evento en particular", aunque además, esta reacción también "depende también de la confianza que la gente tenga en el gobierno y su policía", comentó.