Junto a sus compañeros, el lagunero manejará la defensiva santista en el juego de ida. (Fotografía de Jesús Galindo)
Torreón, Coah.- Como buen lagunero, el zaguero de los Guerreros, Rafael Figueroa, quiere dejar en claro ante Monterrey, quien es el verdadero Coloso del Norte, cuando este día comience la final del futbol mexicano entre ambos equipos.
El jugador que tuvo que entrar como relevo en la ida de los cuartos de final en Tuxtla Gutiérrez, debido a una lesión de su compañero Iván Estrada, se mostró contento, de jugar casi todos los partidos de la liguilla.
Acerca del duelo de esta noche dijo: “Sabemos cómo es esta rivalidad, vamos a tomarla como un gran compromiso con la afición, dar el máximo de cada quién y brindarles un gran regalo que sería el campeonato”.
Agradeció a Dios, la oportunidad que se le ha presentado para jugar, ya que este deseo data desde el arranque del campeonato, en la que estuvo a la expectativa, pero ahora está muy contento porque ha trabajado muy duro.
También habló del rival: “Sabemos que tiene jugadores importantes, una de las principales cosas que debemos hacer es no regalarles ni un metro, hay que cerrarles todos los espacios”.
Consideró que De Nigris es un jugador muy fuerte y Suazo muy rápido, por lo que no hay que darles ni un metro de distancia, lo que sería un punto importante y a favor para el partido de ida.
Durante la fiesta grande del futbol mexicano, Figueroa se desempeñó como carrilero, pero con el regreso del “Guti” Estrada a la alineación titular y la suspensión de Felipe Baloy, el defensor cumplirá labores de marcador por derecha, por lo que se mostró contento.
“Regresa un compañero, pero otro fue expulsado y hay que desempeñar funciones que no se me dificultan, pero lo ideal es ayudar al equipo a ganar”.