El futbol del barrio ha sido un semillero importante, quienes lo practican sueñan con ser futbolistas profesionales, algunos llegan a hacerlo realidad, otros no. (Fotografías de Jesús Galindo)
Bastan dos piedras, dos ladrillos o dos mochilas para improvisar una portería en cualquier calle de La Laguna, y un balón en buenas o malas condiciones, o hasta una lata de jugo rellena de papeles para practicar el futbol y jugarlo con gran intensidad en el barrio, cuadra, colonia o placita.
Del futbol de la cuadra han surgido varios jugadores profesionales en esta Comarca, entre los que podemos mencionar a Guillermo "El Choque'' Galindo, José Guadalupe Rubio Talamantes, Martín Martínez Mota, Bismark Rodríguez, Paco Dávila, Gabriel Palmeros y Rafael Figueroa y Pablo Arturo Metlich, por citar unos cuantos.
El jugador callejero aparece en la canción de Ricardo Arjona, titulada Jesús es Verbo, no Sustantivo, en aquel estribillo que dice: "De mi barrio la más religiosa era doña Carlota, hablaba de amor al prójimo y me ponchó cien pelotas''.
En la calle los niños juegan sin importarles los riesgos que corren, ni las raspaduras y torceduras que sufran a diario. No hay horario para practicarlo, desde temprana hora y hasta entrada la noche.
La pasión por el futbol callejero surge cuando se da la rivalidad entre un barrio y otro, sus partidos son "a morir'' y terminan muchas veces en batallas campales, ya que la pasión se desborda y no hay nada inigualable como ganarle al equipo de la otra cuadra, es algo que se disfruta de una manera especial.
DISTINGUE A NUESTRA CULTURA
Jorge Macías Gurrola, técnico del equipo Toros Laguna de Tercera División, consideró que el futbol callejero es algo que distingue al mexicano y al sudamericano del europeo, esto hace que el jugador latino sea más técnico que el del Viejo Continente, más alegre al jugar, siempre dispuesto a realizar cosas distintas.
"Por eso han surgido jugadores como Leonel Messi y Ronaldinho en Argentina y Brasil, respectivamente, en nuestro país podemos citar a Ramón Ramírez, Cuauhtémoc Blanco y Pablo Barrera, jugadores de ese mismo corte, que por su contexto social empezaron a jugar en las 'cascaritas' del barrio'', recordó Macías Gurrola.
Enseguida consideró que el futbol de barrio es fundamental, si nos vamos a la metodología de trabajo, pues los entrenadores se ahorran mucho tiempo en trabajar cuestiones de coordinación motriz, flexibilidad, incluso, de inteligencia, ya que el jugador las adquiere de manera natural durante la práctica callejera.
Estimó que hay muchas cosas en el futbol de barrio que no enseña normalmente un entrenador, como son la viveza para hacer cosas que un jugador no haría en un entrenamiento, las realiza en el futbol de cuadra.
"Hay jugadores muy técnicos en el barrio, ya que están acostumbrados a jugar en espacios muy cortos, y se acostumbran a jugar bajo la presión que ejerce la porra de la cuadra, que está alrededor de ellos'', precisó.
A manera de ejemplo citó que de hace varios años a la fecha se puso de moda en Alemania el Minifutbol, ideado por Horst Wielin, director de Fuerzas Básicas del Bayer Munich, quien enseñó a los alemanes una especie de futbol callejero de tres contra tres o de cuatro contra cuatro.
Posteriormente, Horst Wielin aplicó esta metodología en las Fuerzas Básicas del Bayer Munich, y surgieron jugadores de la talla de Franckie Lahm, Bastian Schweinsteiger y Totel Frinz Muller.
"Si hacemos un comparativo con Brasil, que es el que tiene más jugadores fuera de su país, los alemanes están de inicio en el futbol de barrio'', comentó.
Apuntó que hace dos años hubo en un canal de televisión extranjera el programa Ginga, del cual surgió "Joga Bonito'', en el cual se relataban las historias personales de jugadores brasileños surgidos del futbol de barrio, como Falcao, Robinho y Edmundo, incluso, la de un deportista con capacidades diferentes, a quien le faltaba una pierna, pero jugaba en el barrio y llegó a ser seleccionado Paraolímpico de su país.
EL FUTBOL IMAGINARIO
Gerardo Macías Gurrola contó que en el año 2002 fue a Brasil a con Fuerzas Básicas del Santos Laguna a competir en la copa Brasileirao en la ciudad de Passos, Brasil, en el estado de Minas, Gerais, en donde le tocó ver jugar al "As del Futbol'', un jugador disminuido en sus facultades mentales, quien sin compañero alguno hacía jugadas y trucos, practicaba chilenas y suponía que metía un gol, el cual festejaba de gran forma.
"El futbol callejero te hacer ser más apasionado, a vivirlo con mayor intensidad. Además, creces con el futbol desde niño y es la competencia más cercana a lo que en realidad es un partido'', precisó Macías Gurrola.
'Nos metían de las orejas'
José Alfredo Hernández Páez, director administrativo de Toros Laguna, recordó que se le hacía noche jugando en la calle, hasta que salía mi mamá y "nos metía de las orejas'' a la casa. "Va creciendo uno y aumenta la pasión por jugar en el barrio, o contra otros barrios, y fijábamos apuestas, primero fue de a refresco, después de cinco pesos y a veces hasta de 50 pesos'', recordó Hernández Páez.
Enseguida dijo que del barrio salen buenos jugadores, como Guillermo "El Choque'' Galindo, Gabriel Palmeros, José Guadalupe Rubio Talamantes, Paco Dávila y Pablo Arturo Metlich, quien se le pasaba jugando la mayor parte del día en la placita del fraccionamiento Filadelfia.
"El futbol del barrio debe ser observado por los visores del Santos Laguna y los equipos de Primera División, ya que hay mucha "tela de donde cortar'', jugadores de buen nivel, que vale la pena mirarlos'', concluyó.