El pasado 13 de noviembre un cártel del narcotráfico lanzó la amenaza de muerte a Don Alejo Garza Tamez si no cedía a entregarles su propiedad. Empresario, maderero, defendió su finca hasta la muerte resguardado entre 4 paredes y armado con pistolas de caza deportiva.
Don Alejo, con 77 años de edad, defendió su propiedad la madrugada del pasado sábado 13 de noviembre. Solo, después de pedir a sus trabajadores ausentarse de la finca, se dedicó a preparar sus armas de cacería para enfrentar con coraje al grupo armado que, sabía, no tardaba en aparecer.
Cuatro sicarios murieron por los ataques de Don Alejo y sus cuerpos quedaron tendidos a las afueras de su propiedad; dentro solo él, Don Alejo ya sin vida, pero sin poner un pie fuera de lo que era suyo.
Es increíble la historia que las autoridades de Tamaulipas están presenciando. Un hombre de 77 años enfrentando a sicarios, con el coraje y la garra que las autoridades no lo han sabido hacer. Sin dudarlo, ya es un héroe, no sólo en Tamaulipas sino en toda la Republica.
Alarma la situación de inseguridad y violencia que vivimos en nuestro país; sin embargo, el pueblo, la gente, da pie a la "justicia por propia mano". Estamos cansados de confiar, de esperar, de callar y de aguantar; sabía que tarde o temprano este momento iba llegar. La gente defendiéndose a sí misma, con sus propias manos y por supuesto; comienzan las pérdidas.
Parecería absurdo pensar que Don Alejo iba ganar esa pequeña gran batalla contra el narco; sin embargo no es el resultado, sino el ejemplo y el valor con el que este hombre defendió su propiedad, a sabiendas que lo que vendría era la muerte. Es el miedo, lo que nos hace ceder ante este tipo de ataques o amenazas, pero aquí está el otro lado de la moneda, su reacción: la impotencia de sentir arrebatado todo su esfuerzo y su vida por esas armas, el coraje de perderlo todo por sentirse vulnerable ante una amenaza, lo que a Don Alejo le impulsó a luchar.
Según El Universal, Genaro García Luna titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal "lamentó que Don Alejo Garza Tamez haya muerto por defender su propiedad de los ataques del crimen organizado en Ciudad Victoria, Tamaulipas".
Una vez más las autoridades "lamentan" lo ocurrido, una vez más reiteran el compromiso con la ciudadanía, una vez más reconocen la necesidad de proteger a la población de este tipo de ataques ofreciendo la mejor arma a su parecer "la denuncia ciudadana".
¿Qué ganamos con denunciar? Frustración y olvido únicamente, ese cuento ya no lo tragamos tan fácilmente, la fe de los ciudadanos se está perdiendo, la confianza no existe y la espera terminó. Don Alejo es el primero, pero aventuradamente me arriesgo a decir que no será el último. Esto sólo es el comienzo de una nueva revolución en manos de los ciudadanos a quienes no queda otra opción más que defenderse a sí mismos, por sí mismos con lo que esté a su alcance.
Lamentable y aterrorizador es el futuro que nos espera, la gente en armas, el pueblo enardecido por la impunidad, el abandono y la opresión. Grupos armados contra gente inocente, trabajadora y "valiente".
Don Alejo, un ejemplo, un héroe, un valiente, o simplemente un hombre que no dejó pisotear sus sueños ni arrebatar su vida por el miedo. Q.E.P.D.
