Federico Insúa sufrió una rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, se perdió todo el Clausura 2008. (Jam Media)
México, Df.- Pésimas campañas, un año sin calificar a la liguilla y futbolistas con lesiones de gravedad es el precio que deben pagar los equipos mexicanos por el "vicio de empinarse una copita...", la Libertadores.
Y es que el torneo Interliga, selectivo para el máximo certamen continental, está salado, pues en cinco de sus seis ediciones el campeón de la justa clasificatoria no avanza a las fases finales del torneo mexicano, ocupando los sitios más bajos en la tabla general.
Así le ocurrió a Santos (2004), Tigres (2006), Necaxa (2007), América (2008) y Chivas (2009). El único que libró la maldición fue el mismo conjunto regio en 2005, cuando se coronó en el Interliga y avanzó hasta cuartos de final y semifinales en los torneos Clausura y Apertura, respectivamente, de ese año.
Un ingrediente extra son las lesiones. Saturnino Cardozo, Oswaldo Sánchez, Everaldo Barbosa y Federico Insúa figuran entre las víctimas.
Así que América, Monterrey, Santos, Puebla, Atlante, Tigres y Estudiantes, que disputarán el Interliga 2010, ponen en juego algo más que su boleto al torneo libertador.
Santos fue el primer campeón maldito desde que se creó el Interliga, en 2004. Ese año los laguneros no pudieron avanzar a las finales del Clausura y Apertura del balompié mexicano, mismos que terminaron en el deshonroso lugar 14 general. En 2005, Tigres figuró como la única excepción hasta el momento, al proclamarse monarca del Interliga y calificar a cuartos de final del Apertura y a semifinales del Clausura.
Pero el siguiente año, los mismos felinos fueron presa de la salación, pues cantaron victoria en la justa clasificatoria a la Libertadores, pero se quedaron sin liguilla, con un lugar 12 general en el Clausura y 16 en el Apertura. En 2007, Necaxa corrió la misma suerte al no calificar a las instancias decisivas de la liga azteca y terminar en el peldaño 17 del Clausura y en el 11 del Apertura. Al América le tocó el turno de sufrir el maleficio en 2008, año en el cual no avanzó a liguilla, culminando el campeonato azteca en el escalón 18 (Clausura) y 13 (Apertura).
El más reciente monarca del Interliga es Chivas, que tuvo un 2009 mediocre, con un sitio 11 (Clausura) y 14 (Apertura).