La parte 1 del último filme de Harry Potter está por estrenarse; sin embargo detrás de éste hay un éxito sin precedentes.
La historia inició hace ya 20 años. O quizá más, cuando Joanne Rowling dice que escribía cuentos y se los leía a su hermana, dos años menor.
La escritora nacida hace 45 años en Gloucestershire, Inglaterra, empezó a idear y escribir la saga de Harry Potter en 1990, y hasta 1995 culminó La Piedra Filosofal, el primero de siete libros. Y la versión cinematográfica del último, Las Reliquias de la Muerte I, se estrena el jueves 18 en México.
Se dice que al terminar esa primera entrega, Rowling no tenía esperanzas de éxito. Graduada en Filología en Exeter, con 25 años, divorciada, pobre y con una bebé, Jo adoptó el seudónimo J.K. a sugerencia de su editorial, que pensaba que el libro no tendría buena acogida entre los niños si veían que estaba escrito por una chica. Y lo publicaron. Ahí inició una historia de éxito editorial, cinematográfico sin precedentes.
MEZCLA MÁGICA
El éxito literario, primero, y cinematográfico después de la saga se debe a una mezcla de sentimientos. Influye el despliegue de mercadotecnia que se realizó para promocionar las películas y cientos de productos más. Sin embargo, sin tener una prosa extraordinaria ni un lenguaje prolífico, y utilizando lugares comunes en su escritura, Jo llegó al corazón de niños y adultos.
Harry, un niño sin malicia, y sus dos amigos, Hermione y Ron, hicieron leer a millones en un mundo en el que la violencia es cotidiana y en el que el hábito de la lectura en los jóvenes parecía difícil de formar. Todo sin un propósito ni lenguaje moralistas.
"Quise representar las ambigüedades de una sociedad donde la intolerancia, la crueldad, la hipocresía y la corrupción abundan, para mostrar lo heroico que es, cualquiera que sea tu edad, luchar en una batalla que nunca se ganará", dijo Jo al recibir el Premio Príncipe de Asturias Concordia 2003.
Según un estudio publicado en Inglaterra en 2006, 51% de los lectores de la serie de entre 5 y 17 años dijo que no había leído por placer antes de Harry. Las películas completaron este círculo virtuoso, con la visualización de un mundo que muchos imaginaron en los libros y del cual Jo estuvo al pendiente cuando vendió los derechos.
Jo puso de moda a los adolescentes heroicos que generan millones de dólares y de jóvenes lectores y cinéfilos, como Crepúsculo, que aunque también bate records, carece del toque conmovedor de Harry, el niño que vivió.
Libros
Los siete libros que completan la historia de Harry, han sido todo un fenómeno.
⇒ La Piedra Filosofal. 1997. Harry descubre que es mago cuando es invitado al Colegio Hogwarts. Ahí conoce a Ron y Hermione, y se enfrenta por primera vez con Voldemort, que busca la piedra filosofal para recuperar su poder.
⇒ La Cámara Secreta. 1998. En el segundo año en Hogwarts, suceden ataques. Se dice que alguien abrió la cámara secreta y todos creen que fue Harry, pero en realidad es Ginny Weasley, inducida por el "recuerdo" de Tom Ryddle.
⇒ El Prisionero de Azkaban, 1999. Sirius Black escapa de la prisión de Azkaban. Se cree que quiere matar a Harry cuando por quien va es por Peter Pettigrew, el mortífago que delató a los padres del chico ante Voldemort.
⇒ El Cáliz de Fuego. 2000. En el cuarto año en Hogwarts se realiza un torneo entre tres escuelas de magia, al final del cual Harry es transportado con Voldemort. Éste realiza un rito con la sangre de Harry y recupera su cuerpo.
⇒ La Orden del Fénix. 2003. Dumbledore reorganiza la Orden del Fénix para luchar contra Voldemort. Harry cree que Sirius está en peligro y va al Ministerio de Magia, donde éste muere cuando pelea por rescatar a Harry.
⇒ El Príncipe Mestizo. 2005. Dumbledore hace viajes con Harry a lugares clave en la vida de Voldemort a fin se saber dónde ocultó los horrocruxes que le confieren la inmortalidad. Snape asesina a Dumbledore.
⇒ Las Reliquias de la Muerte. 2007. Harry comprende que, para destruir a Voldemort, debe presentarse ante él sin resistencia. Al final, una lucha a muerte en Hogwarts definirá el destino del mundo mágico.
