Divididos. Llegada del Nazas aleja a las comunidades rurales de la zona sur de la cabecera municipal. CORTESÍA
Una vez más los vecinos de las comunidades rurales y colonias ubicadas del otro lado del río, quedaron separadas de la cabecera municipal con la llegada del Nazas por su cauce natural. Ahora, quienes deseen realizar algún trámite o compra en el Centro, deberán trasladarse hasta Torreón o bien hasta el ejido La Loma, para poder llegar.
Y es que con la apertura de las presas, correrá agua una vez más por el cauce del Nazas, razón por lo que los vados de Ciudad Jardín fueron cerrados a la circulación,
Alfredo Favela, vecino y ex comisariado ejidal de la comunidad de Álvaro Obregón, aunque reconoció que la construcción del puente del Huarache registra un buen avance y será de gran beneficio, "es una molestia quedar 'incomunicados'".
Pero no sólo los miles de habitantes de la zona sur se verán afectados, sino también los comerciantes del Centro, ya que buen parte de esa población representan su mayor clientela.
De las comunidades que quedaron del otro lado del río son:, Álvaro Obregón, el Huarache y la Ermita.
Están molestos
La repentina decisión de la Conagua de abrir las compuertas de las presas, generó molestia en el director de Protección Civil, Vicente García, "porque no nos dio margen para avisar a mucha gente que tiene sus ganados muy cerca de las márgenes del río, para que tomara sus precauciones", explicó.
En cuanto a los habitantes de la zona en riesgo, el funcionario dijo que de inmediato personal a su cargo y del Cuerpo de Bomberos se dieron a la tarea de notificarles sobre los peligros que corren, y es que aunque la pasada avenida no se registraron nuevos hundimientos, el riesgo está latente.