Preocupación. Además del narcotráfico, el 'Negro' dijo que México tiene muchas cosas más de qué ocuparse.
La violencia generada por la guerra contra el narco ha hecho de México un infierno ante los ojos del mundo, opinó el cineasta Alejandro González Iñárritu.
"Es terrible. La realidad es que, por lo menos a distancia, la imagen de nuestro país está devastada. Leía una entrevista que decía que es más factible que un occidental vaya a Iraq que a México.
"En realidad, hay una percepción de una guerra civil no aceptada y me parece que el país está secuestrado", dijo en entrevista telefónica desde un hotel de San Francisco.
González Iñárritu, quien lleva ocho años viviendo en el extranjero tras el éxito de su filme Amores Perros en 2000, se lamentó por la forma en que las terribles noticias de muerte que se producen en México, oscurecen todo lo demás.
"Es tristísimo para los que somos mexicanos las noticias que salen de ahí, porque además es lo único que se percibe".
A unos días de que Biutiful, su más reciente largometraje, se presente el Selección Oficial del Festival de Cannes, el creador de 21 Gramos reconoció que no consideraría intentar retratar tras una cámara la realidad que vive el país.
"Siempre he tenido problemas con, de alguna forma, homenajear a ese tipo de delincuencia", consideró.
El director, quien es junto a Guillermo del Toro y Alfonso Cuarón uno de los realizadores mexicanos más reconocidos a nivel mundial, consideró que el país, además del narco, tiene otras cosas por las qué preocuparse.
LAMENTA LEY SB1070 Ante la próxima entrada en vigor de la Ley SB1070 que criminaliza a los migrantes en el estado de Arizona, el autor de Babel llamó al Gobierno mexicano a actuar de manera rápida y enérgica para paliar la situación.
"El Gobierno mexicano debería establecer una inmediata comunicación con el Gobierno norteamericano y tomar medidas extraordinarias", señaló el llamado "Negro".
"No se puede permitir que esta medida xenofóbica y muy peligrosa, que tiene el tufillo de una visión radical, como lo fue el nazismo antes de la Segunda Guerra Mundial, empiece a establecer relaciones de violencia racial, y más con una sociedad (la mexicana) que ha ayudado muchísimo a Estados Unidos a ser lo que es".
La ley, aprobada por la gobernadora Jan Brewner y que entrará en vigor en tres meses, otorga a la Policía de Arizona la facultad de detener a cualquier persona de la que se sospeche que es un migrante ilegal.
Esta semana, la organización Amnistía Internacional clamó por la derogación de dicha ley, debido a su naturaleza violatoria de los derechos humanos.
"Va a ser una humillación para todos los niños que viven ahí, para los latinos que, por ser quienes son y ser lo que parecen, serán juzgados, interrogados. Va a ser humillante", dijo el cineasta.
"Me parece que es una vergüenza que este país (Estados Unidos), con un presidente de color (Barack Obama), permita algo tan aberrante".