El escritor, director teatral y guionista italiano, Andrea Camilleri nació en 1925 en Porto Empedocle, provincia de Agrigento, Sicilia.
El perro de terracota, del italiano Andrea Camilleri, es una de las mejores novelas que haya leído jamás. Clasificada en las librerías como novela policial, me atrevo a escribir que, como ésta, las buenas ficciones del género son novelas en toda la extensión de la palabra. Hay misterios, sí, hay pistas, y hay un comisario que trata de organizar los rastros para reconstruir lo sucedido. Pero hay mucho más.
Como anuncia la cuarta de forros, diversas tramas surcan las páginas de este libro: un robo absurdo en un supermercado, el encarcelamiento de un capo de la mafia, un asesinato cometido durante la Segunda Guerra Mundial.
Pero en esta novela, Andrea Camilleri –autor muy leído en otras latitudes– consigue un equilibrio perfecto entre la fabulación y las referencias culturales ancladas en el mundo real (la historia de Sicilia, los cruzamientos con la cultura islámica, las historias de la Guerra Mundial). Si bien hay momentos en que la investigación avanza sólo empujada por el azar, es evidente que el autor busca alejarse de la tradición de la novela policial al estilo Sherlock Holmes: pero mientras las pesquisas avanzan en base a corazonadas, las acciones de los personajes van construyendo una historia tan entrañable como universal.
