Responsable. Javier Covarrubias González de 20 años inventó el secuestro de sus dos hijos en el barrio de Tepito. ARCHIVO
Javier Covarrubias quería buena ropa, relojes y un buen celular, por eso aceptó los 25 mil pesos que le ofreció en préstamo Guadalupe, su vecina de negocio en un mercado de Indios Verdes donde trabajaba.
Y cuando ésta le reclamó el pago de la deuda y le insinuó que para eso tenía dos hijos, él aceptó dejar a los niños en prenda, con la idea de recuperarlos posteriormente sin saber para qué los quería.
Después, el joven de 22 años no supo qué hacer. Su esposa nada sabía de la deuda. Todo ello consta en la declaración ministerial que rindió y a la cual tuvo acceso Reforma.
Posteriormente fingió el robo de los niños, de uno y 2 años de edad, que terminó en una movilización de vecinos de Tepito y en los actos vandálicos de la semana pasada.
El relato que Covarrubias hizo ante el Ministerio Público indica que desde hace tiempo conocía a Guadalupe, pues ella vende quesadillas frente a la marisquería donde él laboraba.
De acuerdo con el testimonio del hombre, que ahora se encuentra arraigado por tráfico de menores, comenzó a emplear parte de los 25 mil pesos para pagos cotidianos, y no tuvo forma de devolverlos.
Finalmente, el 18 de mayo, Javier tomó a sus hijos, metió en una bolsa su ropa y biberones, y los dio en prenda.
"Él pudo haberlos dejado en otro domicilio, pudo haberlos vendido o dejarlos en garantía, lo que sí es cierto es que no hay ningún secuestro, para tranquilidad de los ciudadanos y habitantes del barrio de Tepito", señaló ayer el procurador del DF, Miguel Ángel Mancera.
Ayer la Procuraduría de Justicia arraigó a Javier Covarrubias González, por el delito de tráfico de menores.
