El Comité de Empresa Europeo ya convino en rechazar los recortes salariales durante la reunión que mantuvo el 26 de enero pasado en Amberes, pero hoy ha ratificado este acuerdo delante de la Federación Europea de Metalúrgicos.
Los representantes de los trabajadores de General Motors en Europa acordaron hoy en Bruselas condicionar los recortes salariales por valor de 265 millones de euros anuales propuestos en el plan de saneamiento de la empresa, al mantenimiento de la planta de Amberes (Bélgica), que tiene dos mil 377 empleados.
"No se negociará un plan de ahorro a nivel local hasta que no haya una alternativa para Amberes. Cualquier acción se hará de manera coordinada entre la Federación Europea de Metalúrgicos y el Comité de Empresa Europeo", explicó José Juan Arcéiz, representante de los trabajadores de la planta de GM, en Figueruelas (España).
Según dijo Arcéiz, los trabajadores de fábrica española se limitarán a negociar los 900 expedientes de despido que hay sobre la mesa, dentro del plazo que termina el próximo 8 de marzo; así como el convenio colectivo por el que tienen congelado el salario desde 2009; pero no los 26,8 millones de ahorro anual en costes salariales que la empresa desea obtener de Figueruelas.
El Comité de Empresa Europeo ya convino en rechazar los recortes salariales durante la reunión que mantuvo el 26 de enero pasado en Amberes, pero hoy ha ratificado este acuerdo delante de la Federación Europea de Metalúrgicos.
Los representantes sindicales reunidos hoy volvieron a descartar la convocatoria de paros o huelgas como medida de protesta ante el plan de reestructuración de GM para sus plantas en Europa, que prevé la desaparición de 8.300 empleos de un total de 48.000, además de la obtención de ayudas estatales por valor de 2.700 millones de euros.
"De momento, no se va a tomar ninguna medida de presión, ni de fuerza", descartó Arcéiz.
Los sindicatos también pidieron a sus gobiernos respectivos que no se comprometan a financiar ninguna parte del plan hasta que no haya concluido la negociación con los sindicatos.
El comité de empresa europeo se reunirá el jueves próximo con la dirección de GM en Fráncfort para seguir avanzando en la negociación de plan de reestructuración.
En España, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, ha reiterado en varias ocasiones que el Gobierno no se sentará a negociar con la cúpula de la compañía sobre eventuales ayudas hasta que el plan de saneamiento goce del visto bueno de la plantilla.
La planta de Figueruelas emplea a unos siete mil trabajadores y produce los modelos Opel Corsa, el derivado comercial Combo y el monovolumen Meriva.