Coparmex. Es tarea de Gobierno y sociedad plantear cómo se va a resolver el problema de la inseguridad, dicen los empresarios.
El clima de violencia que se vive en Durango afecta a los empresarios a grado tal de que, en algunos casos, han preferido emigrar para alejarse de la inseguridad.
"Sabemos de casos de empresas que han cerrado por el acoso de las bandas de los grupos delictivos y eso ha llevado a que haya empresarios y sus familias que hayan emigrado de nuestra ciudad a otra parte", admitió Humberto Arellano Carrasco, presidente del Centro Empresarial de Durango (Coparmex).
Lamentó que esto suceda en el estado y que alrededor de un 10 por ciento de los socios de Coparmex, es decir, un aproximado de 45 empresarios, hayan recibido extorsiones.
En cuanto al éxodo de agremiados dijo que, aunque no se tiene un número específico de casos, es una situación lamentable. "Sabemos por gente que reporta estos hechos aquí y dice que va a cerrar o va a cambiar su actividad a otra región del país o a otro país", refirió.
Aseguró que, a pesar de las repercusiones por la inseguridad, en el Centro Empresarial de Durango se trabaja para mantener el padrón de 450 socios. "Las bajas son pequeñas, son de menos del 10 por ciento. Les presentamos el trabajo para que sea atractivo", agregó. Y apeló a la buena disposición de los nuevos empresarios afiliados.
REPERCUSIÓN
El Presidente de Coparmex en Durango lamentó que el clima de inseguridad repercuta en el sector empresarial. "Trabajar en un entorno donde no tenemos paz, tranquilidad y seguridad para las inversiones es desfavorable y afecta mucho al rendimiento de la empresa, de la competitividad", afirmó.
Sostuvo que ha habido acercamiento con las autoridades de seguridad pública en el estado para abordar el tema en donde les han hecho saber los planes que se tienen para combatir el crimen organizado.
Les han dicho que se requiere una mejor formación policial para que realmente estén a la altura de las necesidades y el problema actual. Les han dado a conocer los planes para crear una academia de policía de alta formación que conozca las tácticas y métodos de investigación para el combate a la inseguridad. "Han comentado que tienen esas intenciones, tienen planes de acción, pero no hemos visto los resultados o han quedado en la plática", dijo.
Y externó la necesidad de una iniciativa de ley que permita la implementación de este tipo de academias, con egresados que abonen a evitar la corrupción e impunidad, que es la aspiración de los empresarios.
