La historia del astronauta mexicano José Hernández, ingeniero de vuelo del transbordador espacial STS-128, es también la historia de un hombre humilde de origen hispano que tuvo que recolectar pepinos en los campos agrícolas de California.
Sin embargo, constancia, dedicación y esfuerzo, según sus palabras, lograron convertirlo en el segundo mexicano en viajar al espacio, un modelo de identidad para miles de niños mexicanos que ahora le escriben queriendo también atravesar los cielos.
→ ¿Se puede reproducir el logro del astronauta José Hernández?
Claro que sí, es parte de lo que vengo hacer en mi plática, a través de mis experiencias, de mi trayectoria, cómo nació el sueño de ser astronauta, qué pasos di, qué tuve que estudiar para llegar a la meta y lo que hago es contar mi historia a través de anécdotas.
Yo he leído muchos artículos donde me critican porque yo nací en Estados Unidos y estudié ahí, dicen que esto no tiene nada que ver con el mexicano común, yo les digo que el mensaje que yo trato de proyectar no es cómo hacerse un astronauta, sino cómo salir adelante en la vida.
→ ¿Busca repetir el modelo de identidad que para usted fue Franklin Chang Díaz?
Sí, de hecho es una de las anécdotas que cuento. De ahí la importancia de tener ejemplos, porque para mí el ejemplo fue el doctor Chang Díaz, el primer astronauta de origen hispano, que tenía un acento raro para hablar inglés, como yo, y tenía la piel café como yo, y era de ascendencia costarricense.
Es como motivar para que vean que con esfuerzo se pueden cumplir los sueños.
→ ¿Es el universo como se lo imaginaba?
Para mí fue un gran privilegio llegar al espacio, a donde muy pocos humanos llegan y poder contemplar el universo y la Tierra, es algo que supera cualquier expectativa.
Poder darle vueltas a la Tierra, observar a detalle todo, es una experiencia inolvidable que te deja marcado.
→ ¿Y que se siente estar en el espacio?
Cuando uno está en el espacio siente lo pequeño que es, entendemos que somos una pequeña partícula de nada en comparación a todas las posibilidades que hay ahí en el Universo, somos un pequeño punto, que sería imposible que estuviera solo.
→ ¿Qué fue lo que más lo impresionó?
Cuando uno está dando la vuelta al planeta, justo en la curva donde se pone el sol, uno puede ver por la luz, una capa del grosor de la atmósfera que es algo que se ve muy delicado y frágil, inmediatamente piensas que gracias a esa delicada capa se dan las condiciones para que haya vida en la Tierra.
También cuando aprecias esos detalles valoras más el trabajo de las personas que trabajan por el medio ambiente, porque le das un valor y sabes la importancia de ese balance.
→ ¿Cómo ves el rezago educativo y la falta de acceso al sistema?
Hay que reconocer que hay muchos problemas, como en todos los países, en Estados Unidos también hay muchos problemas, no estamos graduando lo suficiente.
Creo que hay que trabajar en los jóvenes para que precisamente terminen su carrera y no tengan que abrir una tienda de abarrotes en el Centro o viajar de ilegales a trabajar en Estados Unidos.
→ ¿Qué sigue después de cumplir el sueño?
Hay que recoger estrellas y para eso es necesario seguir sembrando sueños, yo aspiro que durante las conferencias que yo imparto en México, aunque sea le pueda cambiar la mentalidad a un solo niño, a uno solo que convenza que hay que estudiar, eso para mí ya es una gran ventaja y una gran labor.
JOSÉ HERNÁNDEZ
Astronauta
Objetivo. El astronauta mexicano José Hernández busca convertirse en un ejemplo para los jóvenes.
