Una de las mejores deportistas que ha dado México anunció ayer que dejaba el golf para dedicarse a su familia.
Lorena Ochoa se retira de la extenuante competencia en la gira de la LPGA, que gracias a su participación, todos en este país empezamos a conocer y a comenzar a disfrutar de un deporte que parecía lejano.
Para muchos su juego ya no era el mismo, por lo que ya sentía pasos por la "legión coreana", que la ponían en peligro al mantenerse en la cima de la circuito femenil, y de ahí la decisión de terminar su carrera. Para otros será el hecho de que ya casada se complica vivir como jugadora profesional y atender a la familia sin sacrificar tiempos y espacios que son importantes.
Finalmente la decisión de Lorena es de una campeona que sabe que sus prioridades en este momento están por encima del golf y que por tanto hay que hacer una pausa.
La golfista tapatía nos ha dejado tanto a aficionados como a todos los mexicanos una enseñanza, las metas por más difíciles que parezcan se pueden lograr, que los límites se los pone uno y uno mismo los puede superar o eliminar. Su paso en el golf nos debe llenar de orgullo porque no cualquiera se mete a un deporte para ser el número uno a nivel mundial.
Si bien la nostalgia se apoderará el próximo fin de semana en el Torneo de Tres Marías en cada golpe que dé la tapatía, su carácter, sus logros y su sonrisa al ganar un nuevo título se quedan ahí como muestra de que si sabes lo que quieres, llegar a realizar los sueños no es imposible.
Es un buen momento para irse como lo que es, ¡LA MEJOR!
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