Homicidio. El cadáver presentó una herida producida por proyectil disparado por arma de fuego en la cabeza.
Una mujer sin vida fue descubierta ayer por la tarde en las aguas del canal de riego que pasa cerca de la carretera a Tlahualilo, por el ejido Jauja, en Gómez Palacio.
En un principio se creía que había muerto ahogada pero al rescatar el cuerpo, los representantes de las autoridades de la Subprocuraduría de Justicia del Estado en La Laguna de Durango le descubrieron una herida de bala en la cabeza.
Las autoridades informan que al filo de las 19:30 horas se recibió el reporte sobre una mujer que flotaba en el canal, entre los poblados Arturo Martínez y Jauja, a donde acudieron el agente del Ministerio Público, peritos de la Procuraduría y los bomberos.
NO TRAÍA BLUSA
Con la ayuda de sogas y ganchos los bomberos sacaron del agua el cadáver de la mujer, de unos 30 años de edad, tez blanca, cabello negro a la altura a los hombros y vestía pantalón tipo pescador color azul marino, brasier azul cielo y no traía blusa ni identificación alguna por lo que hasta la noche de ayer se desconocía su nombre.
En el lugar fueron entrevistadas las personas que hallaron a la víctima y comentaron que fue desde las 14:00 horas cuando pretendían obtener agua de riego pero se dieron cuenta de que el desagüe estaba tapado por lo que fueron a verificar y al llegar a la compuerta vieron el cuerpo sin vida de la mujer que impedía el paso de la corriente.
Luego de dar fe del hecho, el agente investigador del Ministerio Público dispuso el traslado del cadáver al anfiteatro del Servicio Médico Forense, en las instalaciones de la Subprocuraduría.
Murió; su esposa se salvó
Con múltiples heridas de bala resultó el conductor de una camioneta, luego de que sujetos armados abrieron fuego contra la unidad y provocara que chocara contra la barda de dos establecimientos en la avenida Francisco I. Madero y calle Matamoros, de Gómez Palacio, frente a la iglesia del Sagrado Corazón; la víctima finalmente murió en un hospital.
La Procuraduría informó que el occiso respondía al nombre de Roberto Chapa Chávez, de 56 años, y según los datos del forense se le apreciaron siete balazos.
Su esposa, María Gudalupe González, quien iba con él en la camioneta Chevrolet, tipo Silverado, color rojo, comentó que no supieron desde dónde les dispararon.