Enero reportó 144 muertes crudas

Arrancó el año más violento en comparación al inicio y final del 2009; de acuerdo a las estadísticas elaboradas por El Siglo de Durango, durante el mes de enero se registraron 144 muertes violentas en la entidad siendo relevantes las 51 provocadas por arma de fuego y las 22 en volcaduras de vehículo, sin dejar de mencionar las 23 suscitadas en el interior del Centro de Readaptación Social (Cereso) perpetradas con armas blancas.

Del primero al 31 de enero se suscitaron 51 homicidios perpetrados por proyectil disparado por arma de fuego, 32 por heridas de arma blanca, 22 en volcaduras de vehículos, diez por asfixia o estrangulamiento, ocho atropellados, cinco suicidios, dos en choques automovilísticos, dos más por golpes y 12 por otras causas. Cabe señalar que del total de decesos 83 presuntamente fueron perpetrados por la delincuencia organizada.

 NIÑOS MUERTOS

El año inició con lamentables noticias, en la primera semana perecieron cinco niños en diferentes accidentes.

El 4 de enero se presentó un trágico accidente en el que un camión de pasajeros se volcó a diez kilómetros antes de llegar a la mancha urbana de la capital.

Ahí perdieron la vida Paulina Solís Alcalá, de ocho años de edad; Gustavo Bañuelos Rivas, de 11; María de la Luz Estrada Rivas, de 18; y Olga Mancinas Corrales, de 78.

De la misma manera la Procuraduría informó que el pasado 5 de enero en el fraccionamiento Santa Rosa, en la ciudad de Gómez Palacio, dejó de existir el niño Juan Alberto Pimentel Vázquez, quien apenas tenía cuatro meses de haber nacido. Los hechos se registraron cuando el señor Juan Pimentel, padre del menor, estaba jugando en la cama con sus otros hijos y en un movimiento brusco provocaron que el ahora occiso se cayera y se golpeara la cabeza.

El 7 de enero las tragedias continuaron en la ciudad capital, en el libramiento San Ignacio se impactó un vehículo del servicio público tipo Atos contra la plataforma de un tráiler que se encontraba estacionado.

Paramédicos de la Cruz Roja y de Protección Civil acudieron al lugar y de entre los fierros retorcidos rescataron a la joven mujer, de nombre Alma Guadalupe Villanueva Hernández, de 23 años, y a su hijo Manuel Salvador Ramírez Villanueva, de cuatro, quienes murieron minutos después.

El mismo día un fatal accidente automovilístico se registró sobre la carretera federal Matamoros-Mazatlán, antes de llegar a Ciudad Lerdo, donde murió un menor de 12 años, siendo éste Wilbert Jonathan García Gómez, originario del ejido Los Ángeles, en Ciudad Lerdo.

 MATANZA EN EL CERESO

Otro de los episodios que consternó a la ciudadanía fue la multiejecución de 24 internos del Cereso de la capital, 23 de ellos por arma blanca y uno a balazos.

Fue el 20 de enero, a las 7:00 de la mañana se abrieron las celdas para pasar lista y prepararse para el desayuno, parecía que todo estaba planeado, diferentes grupos de presos se abalanzaron al área de control, llevaban puntas metálicas elaboradas por ellos mismos en los talleres del penal, cuando vieron a sus "blancos", en su mayoría secuestradores y al parecer miembros de un cártel diferente al que predomina en el lugar, los atacaron a muerte.

Se activó el código rojo poco antes de las 7:30, según lo comentó el comandante de la Décima Zona Militar, Moisés Melo García, pero cuando llegaron junto con los policías municipales los custodios del Cereso ya tenían controlada provisionalmente la situación.

Posteriormente llegó el personal de la Procuraduría, entre ellos agentes del Ministerio Público, investigadores y del Servicio Médico Forense (Semefo), mientras tanto las ambulancias de la Cruz Roja ya se retiraban vacías, pues no se presentaron lesionados de gravedad.

La Procuraduría informó que fueron 24 los occisos. Agentes que estuvieron en el interior del penal comentaron: "era un regadero de muertos, no fue en el mismo lugar, como que algunos quisieron correr para protegerse pero fueron alcanzados, otros tenían heridas grandes y profundas en el cuello y pecho".

El reporte señaló que varios de los occisos murieron por hemorragias provocadas por largas heridas en el cuello y otros con profundas lesiones en varias partes del cuerpo, al parecer usaron puntas gruesas y largas.

 ESTRANGULAN A 7 RUMBO A LA FLOR

Entre el 9 y 11 de enero fueron encontrados siete cuerpos sin vida arrojados en parajes diferentes en la carretera a La Flor; uno de ellos era un custodio del Cereso que había sido "levantado" y otro pertenecía a una mujer que también había sido privada de la libertad en la colonia Del Maestro.

El 9 de enero a menos de 20 kilómetros de la mancha urbana de la capital fueron encontrados cinco cadáveres en avanzado estado de descomposición, dos presentaban mutilación de sus extremidades, los cuerpos, víctimas de la delincuencia organizada, estaban en el fondo de un barranco de 80 metros de profundidad sobre la carretera a La Flor, a la altura del paraje conocido como Las Ventanas.

Elementos de todas las corporaciones policiacas, incluyendo efectivos del Ejército, se dieron cita en el kilómetro 25+700 de la carretera a La Flor, donde en el fondo de un precipicio yacían los cuerpos putrefactos de cinco personas, mismas que fueron asesinadas y arrojadas en diferentes momentos, pues de acuerdo a los datos proporcionados por el Director de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y el Agente del Ministerio Público tenían diferente cronotonado, es decir, fueron ejecutados y tirados en tiempos distintos.

El día 11 hallaron otros dos cadáveres en un precipicio ubicado un poco más adelante; la Procuraduría informó que se trataba de un hombre y de una mujer.

El cadáver de la fémina rubia de alrededor de 35 años vestía con pantalón de mezclilla, lo tenía a media pierna y una blusa negra atada en sus manos.

El varón, de aproximadamente 40 años, de pelo entrecano, estaba completamente desnudo, con las manos atadas hacia atrás y con cinta canela cubriéndole el rostro. Ambos mostraban huellas de tortura y el hombre tenía una cuerda amarilla de tendedero enredada en el cuello.

 LA SANGRE CORRIÓ EN LA LAGUNA

Más de la mitad de los decesos presentados en la entidad durante enero se registró en la Comarca Lagunera, siendo relevante el número de ejecutados que se reportó.

Más de 50 crímenes relacionados con la delincuencia organizada. A finales de enero se reportó que cinco personas perdieron la vida y una más fue hospitalizada, luego de ser baleadas por un grupo armado cuando se encontraban platicando en las calles de la colonia Santa Rosa de Gómez Palacio.

Algunas estaban en el interior de una camioneta cuando fueron acribilladas.

El reporte de disparos de arma de fuego y de personas heridas generó una gran movilización de corporaciones policiacas de los tres niveles de Gobierno y militares.

Al llegar localizaron los cuerpos sin vida de cuatro hombres, así como a dos más lesionados y quienes fueron trasladados a un hospital de la localidad para su atención médica. Sin embargo, uno de los heridos pereció minutos más tarde.

Precisamente sobre la calle Zaragoza se localizó una camioneta Dodge Ram, doble cabina, color gris con negro, sin placas de circulación. Allí fueron localizados los cuerpos sin vida de Luis Alonso Castro Ríos y Hugo Villarreal Ríos, de 22 y 30 años, respectivamente. Así como los cadáveres de Juan Alberto García Juárez y José David González Aguirre, quienes contaban con 20 y 22 años, respectivamente, informó el Agente del Ministerio Público.

Las autoridades también reportaron a dos personas lesionadas que fueron trasladadas a un hospital de la localidad, donde quedaron internadas. No obstante, minutos más tarde se reportó el fallecimiento de Manuel Martínez Vélez, quien contaba con 22 años de edad y la otra aún está internada.

   CONCEPTO CANTIDAD Arma de fuego 51

 

Choques 2

 

Arma blanca 32

 

Asfixia 10

 

Otros 12

 

 

Ejecutados 83