En este momento la incertidumbre se enfila al punto de tensión más peligroso de las relaciones económicas debido a que Estados Unidos quiere que China deje que su moneda se aprecie para reducir su déficit comercial, China por su parte no quiere permitirlo ya que como sabemos su modelo de crecimiento está basado en las exportaciones.
Al mismo tiempo sucede lo mismo con el resto de las potencias económicas y la pauta lo determina la potencia hegemónica en auge por parte de China y la potencia en declive que es Estados Unidos, las consecuencias para el conjunto del sistema económico internacional y para Europa en particular pueden ser tremendamente negativas y desde luego afectará nuevamente a todo el sistema mundial.
Desde luego que no solo se trata de hegemonías en los tipos de cambio sino el significado que representa cualquier movimiento drástico en este sentido, ya que se está abriendo la puerta a un conflicto comercial cuyas consecuencias no son previsibles y que incluso puede complicar la primacía que en las operaciones mundiales representa la Organización Mundial del Comercio.
La polémica entre el primer ministro chino y el secretario del Tesoro de los Estados Unidos recientemente implica a que nivel se contraponen las políticas monetarias que están implementando principalmente éstos dos países, en contra de China se menciona que mantiene un tipo de cambio subvaluado para ayudar a sus exportaciones y por su parte éste país argumenta que no puede poner en riesgo la actividad productiva del mencionado país, adicionalmente los países del Mercado Europeo están a la expectativa para sus decisiones.
Los estudiosos y especialistas han determinado que los países con grandes superávit comerciales como China acordaron reducir el ritmo de sus exportaciones con el objeto de depender menos de ellas, por su parte los países con grandes déficits comerciales como Estados Unidos tratan de incrementar el ahorro y depender menos de las importaciones.
Aunque el nivel y la tasa de desarrollo económico dependen sobre todo de las condiciones internas (es lo ideal )en las naciones en desarrollo, en la actualidad se da mayor énfasis en el comercio internacional es el disparador para contribuir en el proceso de desarrollo.
Lo cierto es que el comercio internacional es el medio que estimula y facilita la inversión directa de países desarrollados a los menos desarrollados, estimula una mayor eficiencia en los productores y en países como el nuestro satisface la demanda domestica y permite si se aprovecha el tiempo, que paulatinamente se pueda estimular una mayor eficiencia doméstica para poder enfrentar en su momento a la competencia extranjera.
Lo estamos aprendiendo y en artículos diversos he mencionado el hecho de que la economía global como estaba concebida a raíz de la crisis se ha modificado substancialmente, estamos viviendo como las economías azotadas por la crisis reciente no pueden resolver por sí mismas su situación y por otra parte no es fácil aceptar las recetas que a menudo quiere recomendar el FMI, lo que está sucediendo en Francia por el problema de las jubilaciones, es prueba de que en la actualidad las comunidades no están dispuestas a aceptar medidas que beneficien a la macroeconomía sin un sustento que sea equitativo para todos, la justicia social ya no puede ser manipulada por los intereses políticos y esto último lo debe entender nuestro Gobierno ya que a pesar de estar " blindado" nuestro país con finanzas más sanas, continúan los problemas de rezago social, insuficiente el ingreso familiar y desde luego el desempleo con todo y el optimismo exagerado por las cifras dadas a conocer en este sentido recientemente.