Situación. Siete personas comparten un cuarto; dos familias se juntaron después de que una tuvo que abandonar su casa por inundación, en la colonia Potreros de la Laguna.
Obligados a abandonar sus viviendas se han visto habitantes de la colonia Potreros de la Laguna, cuyo asentamiento se hizo en el camino de lo que era un arroyo.
PÉRDIDAS En la calle Cempual está ubicada la pequeña casa de la señora María Zavala; ahí viven siete personas.
"Nos goteamos mucho, se mojó todo, la ropa, las camas, aquí estamos viviendo todos, a la casa de mi hermano se metió el agua".
Pedro Zavala vive a un lado pero lleva varias semanas alojándose con su hermana.
"El agua subió hasta acá (señaló al ras del colchón), se mojó la cama, es la primera vez que se inunda así".
Ambas viviendas están construidas de madera, con techos de cartón, cubiertos por plástico, en el caso de la casa de Pedro, mientras el hogar de María tiene techo de lámina, pero aun así el agua escurre.
Los hermanos Zavala comentaron que en días anteriores el DIF los visitó y les entregó hule y láminas; ambos coincidieron con decepción: "¿de qué sirve?".
Pedro expresó que a los vecinos alguna organización les ayudó a construir sus casas con cemento, "eso queremos, necesitamos que alguien nos ayude".
El niño Edi Camacho dijo de manera inocente que entre la abundante hierba ha visto muchos animales y algunos le han picado: avispas, moyotes, arañas, moscas y mosquitos.
Estos últimos dos se han desarrollado más desde que comenzó a llover y se localizan en los charcos.
Enfermedades como el dengue y paludismo se transmiten por vector.
El DIF nos dio hule y láminas. ¿De qué sirve? Ojalá alguien nos ayude".
PEDRO ZAVALA
Habitante de la colonia Potreros de la Laguna