El Senado de la República entregó, en sesión solemne la medalla Belisario Domínguez 2010 a Luis H. Alvarez y de manera post mortem al ex rector de la UNAM, Javier Barros Sierra.
Al acto acudió el presidente de la República, Felipe Calderón como testigo de honor y correspondió al senador Manlio Fabio Beltrones entregar el reconocimiento a H. Alvarez, mientras que a nombre del ex rector lo recibió su hija Cristina Barros Valero.
Al recibir la medalla, Luis H. Alvarez demandó a todos los ciudadanos actuar 'para revertir las tendencias que han hecho de amplias zonas del país sitios de iniquidades e injusticia' y superar las desigualdades.
Sostuvo que la democracia en México 'sólo se consolidará en la medida en que avancemos en erradicar la discriminación y exclusión que aún viven comunidades indígenas, grupos vulnerables y grupos alejados de oportunidades de desarrollo'.
El militante del PAN afirmó que 'es necesario llegar a coincidencias con base en el diálogo político para establecer programas de acción conjuntos para fortalecer la gobernabilidad y la justicia en un marco de democracia y legalidad'.
Alvarez insistió en que la injusticia no es fruto de una fatalidad abstracta sino resultado de las acciones u omisiones, y que 'solo se pondrá a México en el camino de su pleno desarrollo democrático cuando la política se exprese como una convicción y obligación de servicio'.
En representación de la familia Barros Sierra, Enrique González Pedrero leyó un mensaje en el cual agradeció la distinción post mortem que este día se entregó al ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El ex gobernador de Tabasco destacó las cualidades de Barros Sierra, quien trató que la UNAM forjara profesionales que al mismo tiempo fueran ciudadanos de un país, ya que sin estos no hay democracia.
Indicó que en 1968 Barros Sierra enfrentó 'el monopolio de la violencia y la fuerza física con el escudo cristalino de su autoridad moral; empeñando su vida resultó triunfador y esta medalla que hoy se recibe lo prueba'.
González Pedrero recordó las palabras de Barros Sierra cuando, con la bandera a media asta, el Ejército tomó Ciudad Universitaria en 1968, dijo que: 'la Universidad estaba de luto y la autonomía amenazada gravemente'.
Luego, el presidente Calderón, quien llegó acompañado de su esposa, Margarita Zavala, junto con los titulares de la Corte, Héctor Ortiz Mayagoitia, y de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, montaron una guardia de honor ante el Monumento a Belisario Domínguez, en la sede senatorial.
También estuvieron presentes en la sesión solemne los secretarios de Gobernación, José Francisco Blake; de Comunicaciones y Transportes, Juan Molinar Horcasitas, de la Función Pública, Salvador Vega; y de la Reforma Agraria, Rafael Elvira.
Además, los gobernadores de Chihuahua, César Duarte, y de Chiapas, Juan Sabines, así como anteriores galardonados de esta presea como Jesús Kumate y Miguel Angel Granados Chapa.