Peligro. La temporada podría tener de 14 a 23 tormentas de 120 km/h o más velocidad, de las que de 8 a 14 podrían ser huracanes. ARCHIVO
La próxima temporada de huracanes en la cuenca Atlántica, de junio a noviembre, podría ser extremadamente activa y superar récords históricos, según EU, que cree que el impacto sobre el vertido del Golfo de México sería "secundario".
La secretaria segunda de comercio de la Administración Nacional de la Atmósfera y los Océanos (NOAA, por su sigla en inglés), Jane Lubchenco, dijo que la temporada será de "activa a " extremadamente activa", en función de tres factores climáticos claves.
Si coincidieran los tres factores, la temporada de huracanes "podría ser la más activa de la que se tiene constancia".
Esas tres condiciones son: un fenómeno de "El Niño" más débil que otros años, y por tanto menos capaz de frenar las tormentas; unas temperaturas de las aguas del Océano Atlántico más altas y la aceleración del ciclo tropical iniciado en 1995.
La temporada, que transcurre del 1 de junio al 30 de noviembre, podría tener de 14 a 23 tormentas de 120 kilómetros por hora o más velocidad, de las que de 8 a 14 podrían convertirse en huracanes.
De esos fenómenos, la NOAA pronostica que de 3 a 7 huracanes podrían alcanzar proporciones importantes, hasta de categorías 3, 4 ó 5, con vientos de al menos 180 kilómetros por hora.
Alerta de tsunami
Una alerta de tsunami fue emitida para las zonas costeras del Pacífico Sur, después que se registró un sismo de magnitud 7.2 grados en la escala Richter en el área cercana a Vanuatu.
El epicentro del terremoto fue ubicado a 215 kilómetros al noroeste de la Isla de Santo, de Vanuatu, informó el Servicio Geológico de Estados Unidos.
Debido a la fuerza del movimiento, el Centro de Alerta de Tsunami del Pacífico emitió una advertencia para todas las zonas costeras del Pacífico Sur, incluidas las Islas Salomón, Vanuatu y Nueva Caledonia, aunque no emitieron reportes de oleaje fuerte.