Exposición. La muestra cuenta con una escenografía inspirada en los libros móviles infantiles; además, los visitantes pueden observar una semblanza proyectada en pantallas. Wardrobe Trunk se destaca entre las piezas más icónicas, desde 1875.
La firma presenta una retrospectiva en la famosa Plaza 66 de la ciudad de Shanghai, como parte de la Expo Mundial 2010.
Existen muchas personas que llevan algún bolso o accesorio de Louis Vuitton por el mero hecho de "estar a la moda"; sin embargo, desconocen la historia que hay detrás de la firma francesa y que la ha llevado a ocupar un lugar privilegiado dentro de la industria.
La maison, fundada en 1854 por monsieur Vuitton, comenzó como productora de piezas de equipaje y se hizo famosa por identificar sus diseños con el legendario monograma que sobrevive hasta el día de hoy. Antes de las creaciones de Marc Jacobs y las exitosas colaboraciones con Takashi Murakami, estuvieron única y exclusivamente las maletas.
Por ello, no es de sorprender que la marca enaltezca sus orígenes a través de la Expo Mundial, exhibición que ha existido desde hace 150 años, y continúe su tradición en la ciudad de Shanghai, específicamente en la famosa Plaza 66.
La Expo Mundial, también conocida como La Feria del Mundo, es el equivalente a los Juegos Olímpicos en lo que se refiere a cultura, ciencia, tecnología y economía. Su objetivo, intercambiar ideas entre países participantes, que en esta edición suma alrededor de 200.
Por lo tanto, no es de sorprender que en el pabellón francés se encuentre el trabajo de una firma como Louis Vuitton, que para esta ocasión prestó más de 20 diseños históricos de equipaje. La empresa de marroquinería hizo su primera aparición internacional en la Expo Mundial de París, en 1867.
Las piezas, que se exhibirán hasta el 30 de octubre, se encuentran rodeadas por una espectacular escenografía, inspirada en los libros móviles infantiles. Además, una serie de pantallas tridimensionales proyecta una semblanza de la participación de la maison en las principales ferias mundiales correspondientes a los siglos 19 y 20.
UN POCO DE HISTORIA En 1867, 15 millones de visitantes abarrotaron el evento de París. La marca gala presentó los baúles planos en lona Trianon impermeable color gris, que respondían a las necesidades del viajero, ya que podían ser apilados perfectamente en un vagón de ferrocarril.
Doce años después, LV dio a conocer su nuevo tipo de lona, la Damier. Al ser una época de auge para los trasatlánticos, la marca decidió crear el baúl armario, de diseño vertical y múltiples compartimentos para que los turistas no tuvieran que desempacar sus pertenencias en sus camarotes.
Para 1900, en la Exposición del Centenario, en el Grand Palais, la compañía de lujo obtuvo gran éxito gracias a una serie de modelos blandos y semiduros en cuero. En 1904, marcó tendencia al exhibir un baúl de cobre, resistente al agua, al polvo y a los insectos.
Una selección de los famosos baúles de secretaria, así como una colección de cajas de tocador de cuero, decoradas con detalles de cristal, plata y marfil, fue mostrada en 1925, en París, consagrando el estilo art decó.
La grandeza de la marca llegó a su máxima expresión en 1931, cuando tuvo su propio pabellón en la Exposition Coloniale Internationale, donde se incluyó la colección de máscaras africanas de Gaston-Louis Vuitton, representante de la tercera generación familiar.
ENCUENTRO DE DOS TIEMPOS El antiguo equipaje de LV que se exhibe en la Expo de Shanghai 2010 converge con la modernidad de la metrópoli china. Asimismo, la visión artística es un componente importante del ambiente en el que se desarrolla la retrospectiva de la maison.
El pabellón francés fue diseñado por el arquitecto Jacques Ferrier. El artista trabajó sobre una nueva perspectiva de los jardines del Palacio de Versalles, manteniendo el lineamiento de lujo a la francesa que caracteriza a la marca.
El espacio concedido a LV está unido a siete obras maestras prestadas por el Museo d'Orsay, a través de una réplica de la entrada art nouveau del Metro de París, creada por Hector Guimard.
Los visitantes pueden admirar una proyección digital que juega con la percepción del espacio parisino y que va desde las aguas del río Sena hasta las torres de Notre Dame.
ICONO DE AYER Y HOY Una pieza de equipaje de Louis Vuitton va más allá de la pasión por el lujo, se trata de un componente iconográfico que retrata los cambios y tradiciones que experimenta una sociedad.
En siglos pasados, una maleta de la firma reflejaba los avances tecnológicos que sufrían los medios de transporte como el tren, los trasatlánticos y hasta la creación del primer automóvil. Hoy en día, manifiesta un estilo de vida que se vuelve aspiracional para el común denominador, hecho que materializa el status actual del mundo de la moda.
Las celebridades son un punto focal del presente de la marca. Nombres como Catherine Deneuve, Sean Connery, Pelé, Maradona, André Agassi, Sofia Coppola y Mikhail Baryshnikov, por mencionar algunos, han protagonizado las campañas publicitarias de las antologías de equipaje y accesorios.
Estos personajes se han encargado de mantener viva la leyenda que se escribe dentro de los baúles, maletas y cofres de LV, objetos que, con el paso del tiempo, no pueden transformarse en otra cosa que no sea una obra digna de admirarse en una exposición internacional.
