El 'Palentino' se ganó el aprecio y admiración del público lagunero, aunque no triunfó el pasado sábado en Lerdo, dejó constancia de su deseo por llegar a convertirse en matador de toros. (Fotografía de Jesús Galindo)
Durante casi ocho años el novillero español Juan José Vian López "Palentino'' ha vivido su gran aventura en territorio nacional, concretamente en la ciudad de Guadalajara, donde se ha avecindado, y con el apoyo de quienes le conocen ha logrado mantener viva su ilusión de ser torero, un sueño que muchos acarician y al final pocos pueden cristalizar.
De visita en la región, luego de haber toreado el pasado sábado en la Plaza de Toros Salvador Barrera de Lerdo, "Palentino'' visitó esta casa editora con el objetivo de agradecer el apoyo recibido por parte de la afición taurina, de la Promotora Taurina de Talentos, comandada por el matador en retiro Jorge Mata, y en sí, de muchos que le hicieron sentir la hospitalidad lagunera durante su estancia.
Radicado en Guadalajara desde octubre de 2002, "Palentino'' ha luchado día con día para abrirse campo, no sólo en busca de la oportunidad en el ruedo, sino para lograr sobrevivir en un país ajeno al suyo, al cual ha logrado adaptarse.
Ya sea lavando coches en la calle o vendiendo tortilla española o tortas que él mismo prepara. Este aspirante a matador de toros lucha día a día por alcanzar su sueño y muestra su férreo carácter, el cual asegura le ha ayudado a sobrevivir lejos de su patria.
"No es motivo de vergüenza trabajar en lo que hago, me siento orgulloso de tener un modo de ganarme la vida, aunque modesto, me permite estar en un país donde espero recibir la oportunidad de convertirme en torero''.
Llegó en octubre de 2002 sin mayor referencia de México que saber que se trata de un país donde se dan muchos festejos de toros. "Palentino'' recordó que su primera oportunidad se le dio en Mazatlán, Sinaloa, aunque varios meses después de lo ofrecido, de ahí que tuviera que buscar dónde instalarse, recibiendo el apoyo por parte de la Peña Taurina La Solera, con sede en Guadalajara, donde sus integrantes le facilitan un cuarto.
"Para viajar a México, durante varios meses trabajé en Palencia como ayudante de albañil y realizando trabajos de pintura. Mi sueño era venir a este país y no descansé hasta reunir lo necesario para pagar mi boleto de avión.
Mis padres me dijeron que estaba loco y no sé cuántas cosas más, pero al final terminaron por apoyarme, se dieron cuenta que busco hacer realidad mi sueño y que procuro siempre llevar una vida tranquila, con respeto a la gente que está a mi alrededor''.
Debido al retraso en el festejo de Mazatlán, el boleto de avión para regresar a España se venció y tuvo que quedarse aquí. He ido algunas veces a torear y visitar a mi familia, pero me regreso a este país, donde a pesar de todo me siento feliz.
Con nueve años de andar en busca de fortuna en el ruedo, "Palentino'' afirma que ante la falta de oportunidades sólo ha logrado acumular 30 festejos, la mayoría de ellos en ruedos de México, donde figuran la Plaza México, La Florecita y las establecidas en Aguascalientes, Guadalajara, Cadereyta, Villa de Reyes, Puerto Vallarta, Mazatlán, Querétaro, Cortijo San Felipe (Nuevo León), Ciudad Lerdo y Parral, donde alternó con "El Chihuahua'', quien le ofreció su casa durante un mes, a fin de que lograra recuperarse de un percance.
Desde su llegada a México recuerda haber toreado en tres ocasiones en su natal Palencia: En 2006 cortó dos orejas, alternando con Julio Benítez "El Cordobés''; en 2007 cortó una oreja y alternó con Palomo Linares y Ángel Teruel y en 2009 se fue en blanco.
También en 2006 tuvo la oportunidad de presentarse en Las Ventas de Madrid, donde no tuvo la suerte de su lado, además de que toreó sin estar totalmente recuperado de un percance ocurrido en una ganadería española.
Durante su estancia en La Laguna, el novillero se dio la oportunidad de conocer el Coliseo Centenario, escenario al que calificó de fascinante por su majestuosidad y dejó en claro que uno de sus objetivos será torear algún día en él.
"Me gustaría tener una oportunidad durante el serial novilleril que ahí se realiza, espero tener la ocasión de platicar con el matador Arturo Gilio y solicitarle su apoyo para ello, mientras tanto continuaré con mi preparación y a la espera de que se concreten algunos ofrecimientos que me han hecho para estar en otras plazas''.
El Coliseo, un escenario fascinante
Al emigrar de la madre patria por la falta de oportunidades, el español dijo que la realidad es una tanto en su país como en México, si hay dinero se torea, si no, hay que esperar a que alguien se fije en el talento.
"Gracias a Dios nunca he tenido que pagar por torear, los festejos que llevo los he buscado; yo no tengo dinero para pagar los gastos, quizá por ello es que no he podido despegar, pero tengo fe en que pronto pueda hacerlo'', concluyó.