Los meteorólogos estadounidenses pronosticaron ayer un número menor de tormentas y huracanes para la temporada de huracanes del Atlántico, que entre agosto y octubre se encuentra en su pico, aunque insistieron en que será "muy activa".
Se prevé la formación de entre 14 y 20 tormentas tropicales y de 8 a 12 huracanes, de los cuales entre 4 y 6 podrían ser de gran intensidad (categoría 3, 4 ó 5) en la escala Saffir-Simpson, señaló en una teleconferencia Gerry Bell, meteorólogo de la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA) de Estados Unidos. Bell, del Centro de Predicción Climático de la NOAA, alertó, no obstante, que existe un "90% de posibilidades de que esta temporada de huracanes esté por encima de lo normal".
Por ello, el "mensaje clave", dijo, es que los científicos de la NOAA vaticinan "una significativa actividad para lo que resta de la temporada de huracanes de 2010" en la cuenca atlántica, que comenzó el pasado 1 de junio y concluye el 30 de noviembre. Sin embargo, será de menor intensidad que la del año pasado.