Al menos ocho soldados iraquíes murieron y cuatro resultaron heridos luego que varios explosivos detonaron cuando las tropas intentaban ingresar a un inmueble, reportaron las autoridades locales.
El incidente inició en la madrugada de ayer en el distrito de Sadiya, a 95 kilómetros al Norte de Bagdad, cuando un hombre armado, que se encontraba en el inmueble, abrió fuego contra los soldados de un retén cercano al lugar de los hechos, reportó la agencia iraquí de noticias Aswat al-Iraq.
En ese instante, los soldados pidieron apoyo y rodearon la casa, pero en cuestión de minutos detonaron varios explosivos que destruyeron la instalación y causaron el deceso de los oficiales, explicaron fuentes del Ejército iraquí en Sadiya, ubicada en la volátil provincia de Diyala.
En los últimos atentados, registrados en esta semana, el pasado día 8 al menos doce personas murieron y otras 32 resultaron heridas por el estallido de un coche-bomba en el Centro de la ciudad de Ramadi, a 100 kilómetros al Oeste de Bagdad. El domingo pasado, un coche cargado con explosivos detonó junto a una patrulla de Policía en la localidad de Al Saqlawiyah, cerca de la ciudad de Faluya, 50 kilómetros al Oeste de Bagdad, dejando un saldo de dos policías muertos y otros cuatro heridos.