El Papa Benedicto XVI expresó hoy su consternación por los aluviones que han golpeado en las últimas horas a la isla de Madeira en Portugal, provocando al menos 44 muertos y 250 desaparecidos.
Esto en un telegrama enviado a nombre del pontífice -quien se encuentra de retiro espiritual- por el Secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, al obispo de Funchal, Antonio José Carrilho y dado a conocer este día por la sala de prensa de la Sede Apostólica.
'Consternado por las graves consecuencias de los recientes aluviones en la Isla de Madeira, que provocaron decenas de muertos y enormes daños materiales a los habitantes, el Sumo Pontífice desea asegurar a toda la comunidad local su cercanía', escribió.
El texto, escrito en portugués, aseguró que el obispo de Roma ha recomendado 'a la misericordia de Dios' a todas las víctimas además de suplicar conforto y apoyo para sus familias, a los heridos y a cuantos perdieron sus bienes.
'Para todos quienes han sido probados por este drama, así como a las personas que participan en las labores de socorro y asistencia, Su Santidad Benedicto XVI invoca las reconfortantes gracias divinas y les concede su paternal bendición apostólica', apuntó.