Extremismo. Vigilarán toda clase de organizaciones que se formen en Estados Unidos.
Estados Unidos reaccionó tardíamente para tratar con seriedad la amenaza que plantean los extremistas nativos y el Gobierno ha soslayado la aplicación de mecanismos para enfrentar ese fenómeno que crece, advirtieron los ex encargados de la comisión que analizó los atentados terroristas del 11 de septiembre.
La Comisión del S11 expusieron en un nuevo informe que las autoridades estadounidenses fueron incapaces de enterarse de que no era un hecho aislado el viaje que en 2008 realizaron jóvenes estadounidenses de ascendencia somalí de Minnesota a Mogadiscio para unirse a extremistas.
Por el contrario, el traslado fue uno de varios ejemplos de una amenaza más amplia y más diversa que ha surgido a lo largo y ancho del país. ''Nuestra vieja creencia de que el terrorismo nativo no podía ocurrir aquí ha creado por consiguiente una situación en la que nos encontramos hoy dando tumbos a ciegas en un campo minado en términos legales, operativos y organizativos para contrarrestar la radicalización y reclutamiento de terroristas que ocurre en EU'', dijeron.
En consecuencia, no hay todavía una agencia federal encargada específicamente de identificar la radicalización ni de trabajar para impedir el reclutamiento terrorista de ciudadanos y residentes estadounidenses, señaló el documento, programado para que sea difundido por el Grupo Nacional de Preparación sobre Seguridad, del Centro Bipartidista de Políticas que sus oficinas en Washington.