Momento cumbre. Jesús fue crucificado en medio de dos malhechores y ante la burla y el escarnio de los soldados, a pesar de ser libre de culpa.
Fue un día trágico: Jesús murió ante la presencia de ancianos, niños de brazos, hombres y mujeres que acudieron a la representación del viacrucis que cada año se lleva a cabo en las inmediaciones del Templo de los Ángeles.
"Crucifícale, crucifícale". No hubo marcha atrás: la muerte de Cristo era necesaria para salvar al mundo de sus pecados. Ni Pilatos pudo evitar el sacrificio.
Centenas de personas se congregaron ayer en torno al Templo de los Ángeles, para recordar el hecho que marcó el inicio del cristianismo.
El clima fue benévolo durante esta actividad, ya que en comparación con otros años, cuando el sol está a plomo y el viento es abuntante, ayer fue un día seminublado y el aire ligero. Aun así, las sombrillas, cachuchas y bloqueador no estaban de más.
TRANSCURSO
La mayoría de las escenas de la pasión y muerte de Cristo se escenificaron en el atrio del templo y en la calle del frente, pero el recorrido con la cruz se hizo por la calle Aquiles Serdán, dando vuelta por Dolores del Río, para seguir por prolongación Negrete y de ahí avenida Normal hasta llegar de nuevo al templo, en donde ya se tenía todo listo para la representación de la crucifixión.
Muchos siguieron la ruta de la "vía dolorosa", aunque otros prefirieron apartar un buen lugar para la escena de la crucifixión que se realizó en un templete en el atrio .
En el lugar se podían ver muestras de devoción, sobre todo por parte de las mujeres de más edad, algunas llegando a derramar una lágrima; por otra parte, estaba la curiosidad de los niños, quienes al ver la representación del mal y la muerte se asustaban y soltaban el llanto.
DE TODO
Las fritangas, bolis, tepache, papas fritas y naranjas con chile no podían faltar en esta actividad que forma parte de una arraigada tradición en México, país en el que se realiza una de las representaciones del viacrucis de mayor trascendencia en el mundo. Ayer Jesús expiró. Hoy es un día de silencio y meditación, pero mañana es de triunfo.
Los encargados de la representación
Para poder escenificar la pasión y muerte de Cristo fueron necesarias varias semanas de preparación de más de 100 personas entre actores principales, secundarios y encargados de la logística.
Para los participantes, todos tuvieron la misma importancia para poder realizar una actividad que llegara realmente a las personas que acudieron a presenciar el viacrucis.
La actividad estuvo a cargo del grupo Juventud Franciscana (Jufra) de Durango, con la participación de Jesús Rodrígo Puerta, como Jesucristo; Gloria Casas, como María; Carola Flores, como María Magdalena.
Tambien participó Jazmín Martínez, como María Cleofas; Mónica Quiroga, Verónica; Carlos Mancinas, Juan; Édgar García, Poncio Pilatos; Claudia Solís, como Claudia Prócula; Juan Cervera, Simón Sirineo.
Como Anas, estuvo Reyes Montenegro; Caifás, David Sosa. Judas, Fabían Martínez; Herodes, Fabían Cortez; Francisco Rodríguez fue el centurión y Dimas y Gestas los jóvenes Gerardo y Cristian.
