Minimiza críticas. El auditor superior de la Federación, Juan Manuel Portal (izq.), consideró que las críticas de Unidad de Evaluación y Control de la Cámara de Diputados 'son interpretaciones muy personales'. ARCHIVO
La fiscalización que realiza la Auditoría Superior de la Federación al gasto público sirve de poco y para nada.
Cada año, esa dependencia entrega un informe con observaciones por irregularidades en el manejo del presupuesto, mismo que genera escándalo; sin embargo, los señalamientos en su mayoría quedan solventados, y no pasa nada.
De acuerdo con un informe de la Unidad de Evaluación y Control (UEC) de la Cámara de Diputados, difundido este mes, el trabajo que realiza la ASF desde hace 10 años no contribuye a evitar actos de corrupción en dependencias federales y entidades federativas.
Incluso, añade el documento, la fiscalización no es redituable en la mejora del desempeño de las entidades auditadas.
"No está redituando en forma positiva el trabajo de fiscalización superior en la mejora del desempeño de las entidades auditadas, ni tampoco en el combate contra la corrupción", advierte la UEC, encargada de supervisar el desempeño de la Auditoría Superior de la Federación.
Incluso, sostiene que a pesar de que en 2008 las observaciones de la ASF registraron un descenso en comparación con 2007, -pasaron de 9 mil 557 a 7 mil 745-, las irregularidades detectas por la Auditoría en dicha cuenta pública fueron más graves.
Al respecto, el auditor superior de la Federación, Juan Manuel Portal, consideró que las críticas de la UEC "son interpretaciones muy personales".
Aseguró que la fiscalización sí ha servido para reducir la corrupción en las dependencias de Gobierno; sin embargo, dijo, la corrupción no es exclusiva del sector público "está en todos lados, no es una cosa exclusiva de nuestro país".