La torpeza tropieza
Cuando se cae, al pozo o al reposo. Los tropiezos en nuestro país son tan frecuentes hasta cuando se intenta dar un paso hacia atrás, no se diga cuando se intenta hacia adelante. El daño por la caída dependerá de la velocidad del “soplo”, entre más “sopladores” sean, mayor será el daño. O, del tamaño y constitución de la cabeza. Si es hueca y sin sesos caerá al primer pasito que dé, aunque no le soplen. Si es cabeza dura, en cada caída se levantará y continuará hacia atrás o adelante llena de parches (deudas, corrupción, miseria, conflictos sociales. etcétera). Un ejemplo: el Renaut que ni con muletas pudo dar el primer pasito. Próximamente sucederá lo mismo con la prohibición de antibióticos sin receta médica. Al parecer todavía no tienen desarrolladas las neuronas. Igualmente con las pruebas de ENLACE, que ni con silla de ruedas ha podido avanzar y ni convencer. Pero, ¿qué importa que después de caído volver a caer? Del suelo ni de 5 de calificación habremos de pasar. “Levantamos el vuelo por necesidad. Volamos y volamos por curiosidad. Planeamos ante la duda. Aterrizamos llenos de experiencia. Nos estrellamos o tropezamos por torpeza”.
Eduardo González Caldera,
Torreón, Coahuila.
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Oportunidad perdida para reforestar... pobre Torreón
Qué lástima que ahora que remozaron los camellones de la mayoría de las vialidades hayan sembrado palmas, pudiendo haber sembrado árboles que den sombra, que enfríen el pavimento y reflejen menos calor; árboles con bastante follaje para que ayuden a combatir la contaminación ambiental, cambiando el bióxido de carbono por oxígeno. No necesitaban podarlos ya que al estar en medio del camellón pueden crecer libres de cables y sin estorbos y si hubieran quedado cerca de la orilla los mismos vehículos podando los van. Vean los camellones centrales de la calzada Juambelz, el camellón central de la calzada Abastos, los de la avenida Madrid y calzada México (es la misma) y este es camellón central de angosto, qué diferencia de forestación. En fin, una oportunidad perdida para reforestar mejor la ciudad.
Carlos Flores,
Torreón, Coahuila.
