Calderón no da una
Programar a tontas y locas cambios en México para que todo siga igual, es lo que hace el presidente Calderón, que no da una, en parte porque muchos mexicanos -la mitad o más- lo consideran un tanto ilegítimo.
Se dijo presidente del empleo y más mexicanos quedaron sin él. Medio millón al año tienen que emigrar a Estados Unidos u otras naciones para mantener a sus familias. Luego le declaró la guerra a la delincuencia organizada aunque sabemos que fue a “sugerencia” de la embajada gringa –lo confirmó en un dicho el actual embajador- ¿y qué sucedió?... que en tres años y tres meses de guerra contra esa delincuencia, las ejecuciones han llegado a 19,482 cosa que ni en Irak o Afganistán pasa y aún así, Calderón se frustra porque se habla mal de México cuando de lo que se habla mal es de él y de sus secretarios y con justa razón.
La entrevista que le hizo Julio Scherer a Ismael “El Mayo” Zambada demuestra la ineptitud del Gobierno y, que la Inteligencia en México es inferior a la de un periodista honesto.
Este 5 de abril Calderón tomó la bandera de guerra contra monopolios, porque la Casa Blanca le ha girado instrucciones que controle a Telmex para bajar precios a usuarios y a competidores por conectarse a su sistema.
Los monopolios, en efecto, restan competitividad, sin embargo el peor monopolio es el del poder y la política que está en manos de la Presidencia y de los dos partidos con los que este presidente gobierna porque el PAN y Calderón no lo han logrado por sí mismos.
El PRI les permite gobernar, legislar y concertar maniobras, muchas de ellas, contrarias a los intereses del pueblo, lo hace blandiendo, incluso, la ilegitimidad de Calderón en Los Pinos, le han gritado en su cara que gracias “a un arreglo entre PRI y PAN” él está en la Presidencia. Queda claro que en México no hay democracia. Los mexicanos no escogen a quien los gobierne, son los partidos. El PRI y PAN así lo quisieron.
Yo recomendaría a Felipe Calderón que se deje de bravatas contra los monopolios porque es sólo demagogia barata. Ya le dijo Slim que si Calderón quiere, vende al Gobierno Telmex para que se deje de habladurías. Entonces este grito contra los monopolios sirve para complacer a la Casa Blanca en sus demandas y escandalizar en los medios como el asunto de Paulette que lo han convertido -Televisa, Tv Azteca y otros medios- en vocinglerío estentóreo para perturbar la mente de los mexicanos y desviarla de otros asuntos más importantes como son: la impunidad prevaleciente en miles de ejecuciones un día sí y otro también en todo México, lo del incendio de la guardería ABC en Hermosillo, Sonora y la propuesta de Ley laboral presentada por Javier Lozano y que no es más que otro atraco a los trabajadores mexicanos a favor del patrón.
Eso y nada más eso, es pura demagogia su grito contra los monopolios.
Augusto Hugo Peña D.
Torreón, Coahuila
