El mejor abogado de las peores causas...
Mala noticia para la nueva y la vieja esposa del panista. Los hijos probablemente la reciban con gusto y sabor humanista, para los panistas que aman al Partido Acción Nacional, el regreso de Diego Fernández no les ofrece más que tormentosos días de la entrega de su partido a los designios de Carlos Salinas de Gortari y su pandilla, la que sin dificultad -gracias a la inoperancia política, corrupción y falta de sentido común de todos ellos- gobernará el país a sus anchas y largas, si todo sigue como hasta ahora.
No digo que Diego Fernández haya sido secuestrado por él mismo, no, él no tiene la capacidad operativa de Carlos Salinas & Asociados, y la pronta aparición del barbón del puro me indica que todo va sobre rieles hacia las elecciones de 2012 para el principal grupo político del Partido Revolucionario Institucional. Beatriz Paredes, Gamboa Patrón, Manlio Favio Beltrones, la maestra Gordillo y el dinero que escurrirá del Instituto Federal Electoral, del Estado de México, de la Comisión Federal de Electricidad gracias a Tito Elías Ayup, su director general, y de Petróleos Mexicanos vía los operadores priistas enclavados cual chinches y piojos en la paraestatal, lo lograrán. Peña Nieto por el PRI como el gran encubridor del tío y ahijado de Salinas de Gortari, y por el PAN Diego Fernández de Cevallos como servidumbre de postín del propio Carlos Salinas, garantiza cuando menos dos sexenios para que el grupo y pandilla de Salinas de Gortari termine en Los Pinos y, de entregar Pemex a las trasnacionales, el gas a españoles e ingleses y la seguridad del país -cuando menos la de los que nos gobernarán y algunas instituciones- a manos de expertos israelíes, esos hombres inteligentísimos que han convertido a Gaza y Cisjordania en los campos de Concentración más grandes del mundo, superando con creces a aquellos de Polonia y Austria que el afable Adolfo Hitler tuvo a su consideración construir con los mismos fines que los sionistas buscan, el genocidio de un pueblo. Y no exagero, ya les dieron contrato para la seguridad de la colonia Polanco en el Distrito Federal, por algo se empieza.
Así veo el panorama hacia el 2012 y ojalá que me equivoque, pero el dicho ese que le quitaron el chip es puro cuento, como el de Bazbaz y la familia Gebara Farah, el propio Diego se lo quitó con sus tijeritas que usaba en la barba y las cejas para verse espectacular como él se ve ante el espejo. Los aviones no tripulados del gobierno de Estados Unidos que se usaron para rastrear indicios del ex senador me indican que inteligencias extranjeras participaron en el operativo para llevárselo primero a un paraje a 2 ó 300 kilómetros del rancho y luego, en helicóptero o avión, trasladarlo a espacios alejados más seguros y para dar tiempo de preparar su retorno como víctima y héroe.
¡Qué imaginación!, pero así es la probable, canalla y triste realidad.
Augusto Hugo Peña D.
Torreón, Coahuila
