Somos laguneros
Los habitantes de esta región del país, ni somos “coahuilenses” ni tampoco “duranguenses” somos “laguneros” y como tales es nuestro deber velar por los intereses de nuestra entidad.
Por aras del destino vivimos en una zona conurbada en donde dos ciudades importantes de dos estados diferentes son tan vecinas que sólo unos cuantos metros las separan, de ahí lo complicado de llegar a acuerdos satisfactorios para ambas partes, nadie quiere ceder el poder.
Hay políticos, analistas y periodistas de la localidad que acostumbran a hacer distinciones según sus intereses y conveniencias “la balacera fue de aquel lado del río por lo que no cuenta para las estadísticas de este otro lado”. “La contaminación viene de allá”. “El agua se la están acabando aquéllos”. “La inversión sólo llega aquí”. etc.
Hay que ser conscientes que todo lo que pasa aquí nos afecta a todos, lo malo y lo bueno tendrá sus repercusiones, suceda en Torreón, Gómez o Lerdo; es evidente que las empresas nos ubican como región y no como ciudades aisladas, representamos un mercado regional y no ciudades independientes.
En una cuestión tan simple como la venta de alcoholes, no hay acuerdos, resulta que en Torréon hay ley seca los domingos y en Gómez no, quienes quieran comprar cerveza ese día que vivan en Torreón, simplemente cruzarán el río y tendrán múltiples opciones justamente después de haberlo hecho.
Jamás las agendas de los gobernadores de ambos estados han estado precisamente en nuestras ciudades, los intereses son los intereses y es claro que el poder político se concentra en las capitales.
Por lo tanto, nos toca a todos y cada uno de nosotros los ciudadanos cumplir cabalmente con nuestras respectivas responsabilidades, así como también procurar una mayor participación en los asuntos que a todos compete.
Cuando nos pregunten de dónde somos, hay que contestar con orgullo y convicción: “soy lagunero” y hacerlo patente en nuestro diario actuar.
Por algo nuestros equipos deportivos profesionales se llaman: “Santos Laguna”, “Vaqueros Laguna” y “Algodoneros Laguna”.
Por cierto, en vez de “vencimos el desierto” (frase poco ecológica), podría ser “osadía en el desierto”.
Jaime Díaz de León.
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Piden agentes de vialidad
Diariamente a la entrada a la Universidad Autónoma de la Laguna por el bulevar El Tajito se hace un “cuello de botella”, porque los padres de familia dejan a sus hijos entre las 7 y 8 de la mañana.
Esto se agrava por el sol que ciega a quienes vienen del poniente y al llegar al cruce de entrada a la universidad se crea un caos al ho haber ni un agente de tránsito para aliviar el tráfico que se incrementa con el paso de los camiones de transporte público de Jacarandas, por lo que urgen agentes que hagan fluir la vialidad en ese punto.
Anónimo.