Para la Cámara de Comercio de Torreón, la creación del Paseo Comercial Cepeda-Valdés Carrillo en el Centro Histórico de la Ciudad, fue un fracaso por su mala planeación. El tiempo lo ha demostrado, asegura Félix Pérez Murillo presidente del organismo empresarial.
A casi dos años que se terminaron las obras, siguen cerrados alrededor de 100 locales de aluminio de los 315 que se construyeron con infinidad de "detallitos'' . A la distancia y al ver que "el proyecto de rescatar el Centro Histórico de Torreón quedó convertido en un tianguis donde predomina la basura y aguas negras'', considera que los más de 110 millones de pesos invertidos, "fue dinero tirado".
Declaró que hoy en reunión que tendrá con el alcalde Eduardo Olmos, le planteará la necesidad que se ocupen esos locales y que no se entreguen las concesiones sino que se traspasen los derechos.
De los puestos actualmente vacíos, prácticamente un 80 por ciento nunca se abrió y los beneficiarios sólo se presentaron el día en que la anterior administración les dio 10 mil pesos de indemnización, pero nunca se volvieron a parar. La empresa Dursa, propiedad de Rigoberto Mena fue la encargada de la obra
"Le vamos a plantear el alcalde Eduardo Olmos que se haga algo provechoso con esos espacios, pues el ambulantaje tiende nuevamente a desbordarse.
A finales de 2008, el entonces secretario del Ayuntamiento Rodolfo Walss declaró que: "el paseo Cepeda-Valdés Carrillo será el eje del rescate y además que se promoverán inversiones para el sector, a los empresarios interesados en invertir en estacionamientos el Ayuntamiento les otorgará estímulos fiscales vía Impuesto Predial".
