Fuerzas israelíes se apoderan de barco humanitario
Fuerzas israelíes abordaron y confiscaron ayer sin encontrar resistencia un barco con ayuda para la Franja de Gaza, impidiéndole que rompiese un bloqueo marítimo israelí del territorio gobernado por Hamas, días después de que una operación similar culminase en derramamiento de sangre.
El barco irlandés Rachel Corrie, de mil 200 toneladas, que transportaba a 11 activistas propalestinos, nueve tripulantes y cientos de toneladas de ayuda fue interceptado en aguas internacionales a unos 30 kilómetros de la costa de Gaza y estaba siendo escoltado al cercano puerto israelí de Ashdod, informó el ejército.
La vocera militar, teniente coronel Avital Leibovich, dijo ayer que la aprehensión se realizó en minutos y que el capitán del barco había reunido a los pasajeros en una zona de la nave al parecer para evitar la violencia.
Agregó que los comandos treparon al barco desde el mar, en vez de descender desde helicópteros, como ocurrió el lunes cuando murieron nueve activistas.
La comunicación con el Rachel Corrie había dejado de funcionar, de modo que los teléfonos satelitales no sirvieron durante la detención y los activistas no pudieron establecer contacto.
Varios buques de guerra israelíes siguieron al barco desde la madrugada y determinaron impedir que llegara a Gaza a pesar del rechazo internacional por la violencia acontecida en la semana.
El primer ministro Benjamin Netanyahu dijo que tras la toma de ayer no permitirá que se "establezca un puerto iraní en Gaza".
Irán es uno de los adversarios más intransigentes de Israel y proporciona armas y dinero a Hamas.
Netanyahu sostiene que el bloqueo en Gaza sirve para evitar que las armas lleguen a Hamas. Pero este bloqueo de tres años también ha impedido todas las exportaciones y la mayoría de las importaciones, excepto por los bienes humanitarios básicos.
'SOMOS TODOS HIJOS DE GAZA'
Miles de personas marcharon ayer en París para protestar contra el bloqueo de la Franja de Gaza por parte de Israel y la redada mortal de militares israelíes contra una flotilla humanitaria que llevaba provisiones al territorio palestino. Los manifestantes cantaban: "Somos todos palestinos" y "Somos todos hijos de Gaza".
