El pundonor y el corazón fueron el motor de La Franja una vez más, pero en esta ocasión no fueron suficientes ante el talento de unos Tuzos que supieron imponerse en feria de goles. (Jam Media)
Puebla, Pue.- Puebla se olvidó de los problemas extracancha de su directiva y puso empeño ayer en la cancha, pero Pachuca fue letal frente al marco y en juego con muchas emociones, goles y volteretas salió con la victoria 5-3.
El uruguayo naturalizado mexicano Álvaro "Bola" González anotó el primer tanto de Camoteros a los 26, mientras el guatemalteco Carlos "Pescadito" Ruiz consiguió el segundo a los 45 y el uruguayo Marcelo Palau consiguió el tercero, un golazo de tiro libre en el 58.
Por Tuzos, Ulises Mendívil marcó a los 27 y 63, para su segundo doblete consecutivo, en tanto que el argentino Damián Álvarez concretó en el 35, para dar la primera voltereta y el estado-unidense José Francisco Torres anotó el cuarto en otro tiro libre al 84 y el pampero Darío Cvitanic cerró la fiesta de goles al 95.
Tras este encuentro de la jornada 5 del Torneo Bicentenario 2010, del futbol mexicano de Primera División, disputado ayer al mediodía en el Estadio Cuauhtémoc, la escuadra de la Franja se quedó con cuatro puntos, mientras los hidalguenses sumaron 12, ambos en el Grupo Dos.
Completamente alejado de los problemas extracancha de su directiva, de los que a media semana se quejó el timonel José Luis Sánchez Solá, el Puebla se metió al partido para ofrecer un buen futbol, pero en especial mucho empeño y esa garra característica que le da "Chelís", para buscar regalar a sus seguidores un triunfo en casa.
Tras sólo algunas aproximaciones en ambas porterías, a los 26 empezó la feria de goles, cuando Gilberto Mora mandó un servicio desde corredor del área por izquierda hacia el primer poste, donde se anticipó Álvaro "Bola" González para conectar con la testa y evitar que despejara Javier Muñoz Mustafá.
El problema para los poblanos, tal como sucedió cuando tomaron la primera ventaja en el partido, fue que no supieron manejar el encuentro y ante un equipo con atacantes peligrosos y encendidos eso fue decisivo para el rumbo que tomó el choque.
Ulises Mendívil fue más rápido en reacción que el zaguero central Joaquín Velázquez y que el arquero Villalpando, quien había rechazado en corto un disparo de Damián Álvarez, que buscaba meterse abajo junto al poste derecho, para robar el esférico y después mandarlo a las redes para empatar otra vez el marcador, en el 63.
Puebla se fue con todo en busca de rescatar la igualada en casa, en los últimos minutos del choque, pero los visitantes soportaron la presión y en tiempo de reposición (95) incrementaron su ventaja.
