El gobierno federal determinó que mantener un programa de subsidios de energéticos generalizado representa un costo significativo para el gobierno, pues otorgar este beneficio a la población en general significó en los últimos cuatro años 40 veces el presupuesto que se le otorga al Instituto Politécnico Nacional (IPN).
La Secretaría de Energía advirtió que por esta razón es necesario entrar a una política de subsidios "focalizados" que simplemente beneficien a quienes puedan comprobar sus bajos ingresos.
De acuerdo con las respuestas de la Secretaría de Energía a las observaciones que el Congreso de la Unión hizo a la Estrategia Nacional de Energía (2010-2024), el monto promedio anual de los subsidios en electricidad, gasolina, diesel y gas LP, en el periodo 2005-2009 ascendió a 200 mil millones de pesos en promedio anual, y presentaron un máximo histórico de 392 mil millones de pesos en 2008.
Cifra que equivale a 16 veces el presupuesto anual para infraestructura carretera y 26 veces el presupuesto anual de Procampo.
El gobierno federal consideró en este diagnóstico que la política de subsidios generalizados ha generado "ineficiencia en el uso de energéticos" y sobreutilización de la gasolina.
Además, desalienta la utilización de fuentes alternativas de energía y deterioran económicamente a Pemex.
"La estructura de precios de algunos de los hidrocarburos, en particular del Gas LP, ha generado pérdidas económicas significativas para la paraestatal, debido principalmente a que los ingresos que recibe de las ventas no son suficientes para cubrir los costos de producción y operación", establece el documento.
