Pachuca, hgo.- El Pachuca no sólo domó a los Potros ayer, los arrastró en el césped del Estadio Huracán con una escandalosa goleada de 5-1 que pone en serio peligro la continuidad de José Guadalupe Cruz en el timón azulgrana.
Sumido en una crisis de resultados y con serios problemas en el vestidor, el Atlante fue presa fácil del Pachuca, que ha recuperado la memoria y está en plan goleador en el Bicentenario.
El triunfo le permite al equipo que dirige el argentino Guillermo Rivarola llegar a seis unidades dentro de su sector, el Dos, en tanto que Potros de Hierro se estancó en el fondo del Grupo Tres con un punto.
Luego de mostrar las pancartas en apoyo al paraguayo Salvador Cabañas en el "partido más importante de tu vida", la afición hidalguense lo hizo con su equipo que se veía seriamente amenazado por el cuadro atlantista.
La fiesta comenzó al minuto 15, cuando Darío Cvitanich cabeceó servicio de Damián Manso desde la banda izquierda para abrir el marcador.
Al 36 de tiempo regular Cvitanich recuperó el esférico, avanzó al área y devolvió el pase de gol a Manso, quien se barrió para anotar el segundo.
Atlante acortó distancia tras finalizar el primer tiempo gracias a un autogol de Leobardo López, pero poco le duró el gusto, pues al minuto 53 Gerado Castillo hizo lo propio en la meta de Vilar para poner el 3-1.
Mientras Rafael Márquez falló un penal para la causa azulgrana, Luis Montes, al 68 de tiempo regular, y Juan Carlos Cacho, al 70, redondearon el festín local; Pachuca igualó a Monterrey en la cima de su grupo, pero con mejor diferencia de goles que el campeón.
El trabajo del silbante José Alfredo Peñaloza fue bueno pero se equivocó al marcar el penalty del Pachuca.