Foto: REDACCIÓN LA I
Encuentran sin vida a cuatro presos del Centro de Readaptación Social (Cereso) número 2 de Gómez Palacio.
El hallazgo
La mañana del domingo, cuando se realizaba el recorrido para entregar el desayuno, en el área de segregados, conocida por los internos como el área de castigo, el personal de seguridad halló muertos a cuatro internos, tres de ellos eran procesados por delitos federales y sólo uno por un delito del fuero común.
Ante el lamentable hallazgo, los custodios solicitaron el apoyo de enfermería para intentar auxiliar a los internos, ya que presentaban heridas punzocortantes en diferentes partes del cuerpo, pero lamentablemente ya no presentaban signos vitales.
Los responsables de la dirección del Cereso solicitó entonces la presencia del Ministerio Público para que diera fe de la muerte de los reos.
Arriban autoridades
La presencia del personal de la Subprocuraduría General de Justicia del estado en La Laguna de Durango, arribó al penal alrededor de las 7:50 de la mañana de ayer, para así tomar conocimiento de la muerte de cuatro internos, de los cuales dos se localizaban en la celda 1, mientras que los otros dos en la celda 8 de esa misma área.
El personal de custodia comentó a la autoridad de la Subprocuraduría que fue alrededor de las 7:43 de la mañana, cuando iban a entregar el desayuno a los segregados cuando se dieron cuenta de que habían fallecido, José Ángel Vázquez Jáquez, de 45 años, Erasmo Castellanos Guerra, de 40, Francisco Javier Villarreal Rodríguez, de 48, y Rodolfo López Flores, de 47, al parecer a causa de las múltiples heridas cortantes y ya no tenían signos vitales.
Eran procesados
Elementos de la Subprocuraduría explicaron que José Ángel ingresó al Cereso a disposición del juez Tercero de Distrito el 16 de abril del 2010 por portación de arma de fuego y homicidio en grado de tentativa; Erasmo ingresó el 4 de abril del 2009 por robo de hidrocarburos y se encontraba a disposición del juez cuarto de distrito; Francisco Javier ingresó por posesión de enervantes el 28 de abril del año en curso y quedó a disposición del juez federal, mientras que Rodolfo era procesado desde el 15 de febrero de 2006 por el delito de secuestro y robo de vehículo.
La autoridad estatal ordenó el traslado de los cuerpos al Semefo para la realización de la necropsia.