Los hijos de Sakineh Mohammadi Ashtiani, la mujer iraní condenada a muerte por el presunto homicidio de su marido, pidieron asilo político a Italia y la intervención del Vaticano ante el Gobierno de Irán.
Sajad, de 22 años, y Saideh, de 18, hicieron su llamado a través de entrevistas con las agencias italianas Aki Adnkronos y Ansa."Nuestra condición se vuelve cada vez más difícil y sentimos el peligro de ser arrestados; por lo tanto y considerando la gran atención del gobierno italiano hacia nuestra causa, pedimos al primer ministro Berlusconi asilo político", dijeron. Ello para que "en caso de que intuyamos que somos perseguidos por el gobierno, tendremos un lugar en el cual refugiarnos".
Dijeron temer por la suerte de su madre, que gracias a las presiones internacionales ya no corre el riesgo de ser lapidada por adulterio.
