Festejo. Celebran misa en la Basílica de Guadalupe.
El arzobispo primado de México, Norberto Rivera, consideró que el reto más importante que vive esta Iglesia diocesana, es que necesita de mayor protagonismo de los fieles laicos.
Debido a que la evangelización de culturas y la "inserción de la fuerza del Evangelio" en familia, en el trabajo, los medios de comunicación, el tiempo libre y la vida social y política, "sólo se logrará con laicos preparados y comprometidos que sean testigos de los valores evangélicos".
En la homilía encabezada por el jerarca católico por la celebración de sus 25 años de ordenación episcopal, Rivera manifestó su preocupación por las vocaciones sacerdotales y habló de su ilusión que "el llamado del Señor llegue a muchos jóvenes y encuentre una respuesta generosa".
"Sin ustedes, queridos laicos, esta Iglesia no tiene futuro, la Iglesia los necesita como miembros vivos y no como clientes", dijo.
CONGREGACIÓN En la ceremonia religiosa en la Basílica de Guadalupe, estuvieron Athenagoras y Antonio Chedraoui, arzobispos de las Iglesias Ortodoxas Griega y Antioqueña, respectivamente. También obispos y arzobispos que junto con el nuncio apostólico, Christophe Pierre y Carlos Aguiar Retes, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, celebraron al cardenal Rivera Carrera.
El nuncio apostólico dio lectura a una carta enviada por el Papa Benedicto XVI en la que el sucesor de Juan Pablo II envió una bendición apostólica al cardenal y al pueblo de México.
El jerarca de la Iglesia católica agradeció las felicitaciones que recibió.
Mencionó que la tarea más importante que tiene el obispo es realizar la triple función de enseñar, santificar y gobernar al pueblo de Dios que se le ha confiado.
En la misiva enviada al cardenal, Benedicto XVI agradeció que siguiera la huella de los antiguos pregoneros del señor de modo que la salvación alcance a muchos y se derrame sobre ellos.
El Consejo Episcopal regaló al cardenal Rivera un cáliz con su escudo.
