Aun cuando el gobernador del estado, Ismael Hernández Deras, intervino como mediador en el conflicto del Instituto Tecnológico de Durango (ITD), no se logró una solución que permita el regreso a clases.
En una mesa de diálogo establecida ayer a media tarde, el Ejecutivo se reunió con el director de la institución, Amado Palomino Solórzano; el presidente de la Sociedad de Alumnos, Luis Fernando Soto Jáquez, y el líder sindical Marco Antonio López.
Sin embargo, el único acuerdo fue solicitar al secretario de Educación, Alonso Lujambio, la designación de un interlocutor que lo represente de manera directa, para acelerar la solución.
El Gobernador exhortó a directivos, maestros y estudiantes a que participen de buena fe, a fin de reanudar de inmediato las clases.
Mi preocupación, dijo, "es la misma que la de miles de padres de familia cuyos hijos están estudiando en el ITD; que no se pierda el semestre, lo que afectaría a miles de estudiantes y maestros durangueses".
La propuesta que planteó inicialmente el Ejecutivo fue el regreso inmediato a clases, sin que ello inhiba la expresión institucional de las diferentes posturas.
Reconoció que el ITD es una institución de un gran prestigio académico. "Si todos nos sumamos al interés primordial de lo que conviene al ITD, entonces ganamos todos, gana Durango", enfatizó el mandatario estatal.
