Perspectivas. El nuevo gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, habla en el foro 'Perspectivas Macroeconómicas'. EFE
MÉXICO, DF.- El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, comentó que los nuevos impuestos y los incrementos en los combustibles tendrán impactos importantes en los precios y servicios durante 2010.
"Tenemos dos factores que generarán mayores precios y ya estamos viendo esa manifestación que son las medidas tributarias y las de los bienes públicos. Sin lugar a dudas las medidas tributarias generarán un aumento, pero de una vez por todas en los precios y de alguna manera, los precios públicos sí tendrán un impacto importante que se va a ir desvaneciendo hacia adelante", expuso.
Aclaró que el efecto en los precios al consumidor final será en una sola ocasión.
Al participar en el seminario de perspectivas económicas 2010 "Reactivación económica", organizado por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), informó que la inflación empezará su descenso hasta 2011, para buscar el objetivo de 3% del Banxico.
"En el caso de los impuestos, para 2011 ese impacto ya no existirá, se irá desvaneciendo. Lo adecuado, lo ortodoxo que tienen que hacer los bancos centrales es no contrarrestar, a través de medidas de política monetaria, el impacto directo de estas medidas fiscales", agregó.
Carstens defendió los ajustes fiscales en el país, los cuales son indispensables para la estabilidad macroeconómica de México.
Comentó que la política monetaria reaccionará al comportamiento que tenga la inflación, situación que determinará el nivel de las tasas de interés.
"Si empieza a generar efectos indirectos importantes, eso podría inducir que sea necesario hacer algún ajuste en la política, sobre todo porque eso tendería a afectar los objetivos de inflación en el mediano plazo. Si se está afectando de manera notoria la inflación que ponga en peligro la convergencia al objetivo de mediano plazo, el Banco de México sí tendría que hacer algún ajuste en tasas", dijo Carstens.
Agregó que el Banco de México no estará pasivo, ya que analizará detalladamente todo lo que suceda en la economía nacional.
En su mensaje, advirtió que Estados Unidos tendrá una recuperación menos vigorosa a la experimentada en otras crisis.
Dijo que los tomadores de decisiones en México deberán estar muy atentos al momento en que el Gobierno estadounidense retire los apoyos instrumentados en su economía.
