La ciudad de San Francisco decretó a partir de hoy una moratoria a los viajes de funcionarios de su ciudad y a cualquier nuevo contrato con el estado de Arizona o empresas en esa entidad, como medidas de sanción contra la ley antiinmigrante.
La ciudad de San Francisco decretó a partir de hoy una moratoria a los viajes de funcionarios de su ciudad y a cualquier nuevo contrato con el estado de Arizona o empresas en esa entidad, como medidas de sanción contra la ley antiinmigrante.
El alcalde de San Francisco, Gavin Nuesom, y el cabildo de gobierno instaron a los residentes de San Francisco a no visitar Arizona ni a adquirir productos o servicios de empresas radicadas en ese estado.
Newsom dijo que las dos únicas áreas en las que San Francisco mantendrá viajes y relaciones regulares con Arizona son las de asuntos de salud y de colaboración entre autoridades policiacas.
Quedan suspendidos desde este miércoles los viajes y otras sanciones entre funcionarios y empleados públicos de San Francisco hacia Arizona.
El cabildo de gobierno de San Francisco analiza otras potenciales sanciones a Arizona, pero sin dar pie a que el gobierno o las empresas con sede en ese estado respondan con demandas legales por suspensión de contratos.
Un miembro del cabildo de gobierno del condado de San Francisco, David Campos, quien llegó como indocumentado de Guatemala a la ciudad a los dos años de edad, dijo que desafortunadamente Arizona sólo comprenderá el error de su ley cuando le afecte el bolsillo.
La ciudad y el condado de San Francisco no pueden por ahora decretar un boicot contra Arizona y suspender contratos vigentes con ese estado o empresas en su territorio porque los afectados de Arizona responderían con demandas que pudieran beneficiarles, explicó Campos.
La opción es pedir a los residentes de San Francisco, y básicamente de la área de la Bahía de San Francisco, que ellos lleven a cabo el boicot.
El presidente del Senado de California, Darrel Steinberg, pidió la víspera al gobernador Arnold Schwarzenegger una lista de contratos entre California y Arizona para analizar legalmente cuáles pudieran cancelarse sin permitir que Arizona responda con demandas.
Por su parte, el gobernador del noroccidental estado mexicano de Baja California, José Guadalupe Osuna Millán, dijo a medios de San Diego que los seis gobernadores de la frontera mexicana buscarán una forma de sancionar conjuntamente a Arizona por su ley antiinmigrantes.