Los incendios forestales que afectan la parte central de Rusia han dejado al menos 30 muertos, más de dos mil 200 damnificados, casi dos mil casas destruidas y daños materiales por 150 millones de dólares, según un balance divulgado ayer por autoridades.
Los incendios han afectado hasta ahora 14 regiones rusas, en especial Nizhny Novgorod, Voronezh y Ryazan, informó el Ministerio ruso de Situaciones de Emergencia, citado por la agencia de noticias Novosti.
Casi 240 mil bomberos, apoyados por 25 mil vehículos y 226 aviones y helicópteros, participan en las labores de extinción de los incendios, originados por las altas temperaturas que han alcanzado niveles récord en los últimos días, por arriba de los 35 grados centígrados.
Según el ministerio, la mitad de los 770 focos activos ayer surgieron en las últimas horas y donde más de medio millón de hectáreas fueron destruidas por el fuego desde que comenzó del verano boreal.
Un vocero del Ministerio de Situaciones de Emergencia señaló que 'la situación de los incendios está bajo control' debido a las medidas preventivas que se toman, sin embargo autoridades forestales alertaron que los incendios se extienden al extremo oriente del país.
Los servicios forestales anunciaron la extensión de los incendios al extremo Oriente de Rusia, donde 100 mil hectáreas de taiga y 300 mil hectáreas de llanuras estaban en llamas ayer.
Indicaron que la superficie de los incendios forestales se triplicó en las últimas horas en esta región, al pasar de 31 mil a 99 mil hectáreas.
La mayor parte de estos incendios (76 mil hectáreas) tienen lugar en la península de Kamchatka, en el extremo Noreste del país.
La taiga es una selva propia del Norte de Rusia y Siberia, de subsuelo helado y formada en su mayor parte de coníferas.
Las autoridades rusas han atribuido el fuego a la intensa ola de calor en el país, en particular en el Oeste y Centro, durante las últimas cinco semanas, ya que ha propiciado una fuerte sequía, la peor desde 1972.
Ayer el máximo jefe de la Iglesia Ortodoxa Rusa, el patriarca Kiril, visitó la región de Nizhny Novgorod, una de las más afectadas por los incendios forestales, donde pidió orar para que termine la grave sequía que padece el país.
