No había necesidad de emitir un decreto para ayudar a las víctimas del incendio en la guardería ABC, señaló Juana Luna Hernández, madre de un menor afectado.
La ayuda se debió haber dado desde el principio, y no hasta ahora casi un año y dos meses después, comentó Hernández en entrevista radiofónica, pero consideró que el apoyo psicológico a los padres y las becas para los menores sobrevivientes son una medida correcta.
La señora gastó un millón de dólares para una operación en su hijo, quien resultó con el 95% de su cuerpo quemado, realizada en Estados Unidos.
Los padres de familia que se reunieron ayer martes con Felipe Calderón y entregaron un peritaje realizado por un perito de prestigio internacional, David Smith, quien se solidarizó con ellos y realizó una investigación, la cual sostiene que el incendio fue intencional en una bodega del gobierno estatal, que estaba al lado de la guardería.
Juana Luna Hernández rechazó la versión de que un cooler estalló y fue la causa del fuego, ya que afirmó que esas máquinas trabajan en todo el estado, todo el día e incluso todo el año, sin ningún desperfecto, por lo que es poco creíble que fuera el origen de la conflagración.
El fuego se expandió a las instalaciones del gobierno federal, y de ahí surgió la tragedia, por lo que buscan que se retipifique el delito.
"Aquí no se va a proteger a nadie", comentó Calderón tras recibir el informe, señaló Hernández, y la madre afectada explicó que el peritaje no ha sido agregado a la investigación oficial, ya que al tratarse de un documento en inglés, necesita ser traducido por un perito de la PGR, pero hasta el momento no perciben ningún avance
