Riesgos. Las autoridades de salud temen brotes epidemiológicos por las lluvias.
Los poblados de la franja fronteriza de Coahuila, Tamaulipas y Nuevo León en las márgenes del río Bravo y sus afluentes están en riesgo de padecer brotes epidemiológicos tras las inundaciones y la interrupción de servicios que ocasionó el paso del huracán "Alex".
Los más de mil refugiados en Nuevo Laredo, Tamaulipas, por las anegaciones en el municipio neoleonés de Anáhuac y de colonias aledañas, donde quedaron afectadas más de 3 mil viviendas, se encuentran con alto grado de hacinamiento dentro de albergues, situación que continuará por más de dos semanas, alertó el jefe de la Jurisdicción Sanitaria en la localidad, Jaime Gutiérrez Serrano.
"Estamos en riesgo latente y por eso estamos haciendo búsquedas intencionadas de enfermedades como el dengue, para que la gente sepa cuáles son los síntomas. Estamos en las condiciones adecuadas para que se desarrolle este mal".
Las afectaciones en los últimos 15 días ocasionaron que la Secretaría de Gobernación emitiera ocho declaratorias de emergencia para 87 municipios de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, con lo que se activaron recursos por más de 63.4 millones de pesos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) para necesidades alimenticias, de abrigo y de salud.
En Nuevo León, unas dos mil personas permanecen en albergues, por lo que la Secretaría de Salud mantuvo servicios de consulta médica, entrega de medicamentos y vacunación. Jesús Zacarías Villarreal Pérez, titular de la dependencia, dijo que se supervisa la adecuada preparación de alimentos y se procura el consumo constante de agua potable o embotellada.
En su visita al albergue del Templo de la Misericordia, en la colonia Valle de San Bernabé, al poniente de Monterrey, dijo que durante la contingencia han aplicado más de seis mil biológicos en albergues y domicilios de las zonas más dañadas.
Aseguró que no se tiene reporte de brotes de alguna enfermedad; sin embargo, aceptó que existe preocupación por el eventual incremento de pacientes por males gastrointestinales y de dengue en las próximas dos semanas.
Las dependencias de Salud alertaron a los pobladores que regresan a sus viviendas, pues muchas aún presentan inundaciones importantes y se requieren cuidados especiales para preservar la salud.
Pese a que en Nuevo Laredo, Tamaulipas, sólo se tiene registro hasta ahora de un caso positivo de dengue y cuatro sospechosos, las medidas contemplan cercos sanitarios y brigadas de vacunación. En Reynosa, Tamaulipas, más de 17 mil familias en zonas irregulares continúan en alerta ante el incremento del río Bravo.
La Conagua, a través del Organismo de Cuenca Río Bravo, informó que fueron cerradas más de la mitad de las compuertas de la presa Venustiano Carranza, lo que permitirá que el río Salado vuelva a su cauce y se reabran las carreteras que conectan a Monterrey con Nuevo Laredo.
Plaga de moscos
Mérida y municipios de Yucatán quedaron cubiertos de una auténtica plaga de moscos por las lluvias que dejaron ondas tropicales en los últimos días. Un fuerte brote de dengue no se descarta.
La condición de Mérida se agudizó por el retraso en la recolección de basura y el acumulamiento de aguas negras que se han convertido en criaderos de moscos ocasionado por contratiempos en el cambio de una administración del PAN a otra de extracción priísta.
Las plagas de moscos provocó que la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco manifestara en Facebook que se trabaja en fumigación, pero hace falta el apoyo de la gente en la limpieza de patios.
