Los inspectores de la FIFA pudieron ver el miércoles por primera vez los planes de Qatar para construir una red de trenes rápidos, un aeropuerto y una ciudad satélite que albergará a más de
200 mil y tendrá numerosos hoteles como parte de su propuesta para organizar la Copa del Mundo de 2022.
Los proyectos de infraestructura son parte de las obras por 42 mil 900 millones de dólares que la pequeña nación del Medio Oriente tiene planificadas, gane o no la sede del Mundial. Sin embargo, muchos de los proyectos están siendo acelerados para que estén listos para el torneo.
Los organizadores de la candidatura quieren demostrar que el país, que para algunos es muy pequeño para organizar el torneo, tendrá la transportación y hospedaje necesarios para recibir a cientos de miles de visitantes.
Los inspectores de la FIFA, encabezados por el chileno Harold Mayne-Nicholls, estarán en Qatar hasta el jueves. El martes recorrieron un estadio que utiliza un sistema de enfriamiento con energía solar.
El sistema sería instalado en los 12 estadios propuestos para el Mundial y mantendría la temperatura en la cancha y las gradas en 27 grados Centígrado (81 grados Fahrenheit) , mucho más frío que la temperatura promedio de 41 grados Centígrado (106 Fahrenheit) en junio, julio y agosto.
El director del comité organizador, Hassan al-Thawadi, dijo que la tecnología puede ser expandida para utilizarla en las zonas de fanáticos y los campos de entrenamiento.
Qatar es la última parada del grupo inspector de los nueve países que quieren organizar los mundiales de 2018 ó 2022. La FIFA elegirá ambas sedes el 2 de diciembre.