El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, es investigado por la fiscalía de Trani por presuntas presiones contra la Autoridad de Garantía de las Comunicaciones (Agcom) y la televisión pública (RAI) para cancelar un programa.
La noticia, publicada este viernes por el diario Il Fatto Quotiodiano, provocó que el líder del partido opositor Italia de los Valores, Antonio Di Pietro, presentara ante el Parlamento un recurso dirigido al primer ministro.
Argumentó que el recurso es para conocer 'bajo qué premisas se asume el poder de condicionar un órgano de control como la Agcom'.
Il Fatto Quotidiano aseguró que Berlusconi intentó el cierre del programa 'Año Cero', de la RAI), conducido por el periodista Michele Santoro y muy crítico contra su gobierno.
Aseguró que las presiones de Berlusconi contra el comisario de la Agcom, Giancarlo Innocenzi, fueron detectadas por la autoridad judicial a través de una serie de intercepciones telefónicas de la guardia de finanzas (la policía fiscal).
Las intercepciones fueron hechas en el marco de otra indagación por presunto fraude con tarjetas de crédito.
Pero, según la fuente, Berlusconi también presionó al director del Tg1, el principal noticiario de uno de los canales de la RAI, Augusto Minzoli, y al propio director general de la televisora pública, Mauro Masi.
Masi supuestamente se quejó también vía telefónica con terceras personas sobre las presiones de Berlusconi, que en su opinión no sucedían 'ni siquiera en Zimbawe', según versiones de prensa.
Il Fatto Quotidiano detalló que, Berlusconi, Minzoli e Innocenzi son acusados de 'concusión'.
'El director del Tg1 y el comisario de la Agcom son siervos de las órdenes de Berlusconi y deben renunciar', exigió Di Pietro.
Pero el portavoz del primer ministro, Paolo Bonaiuti, dijo que la publicación de las presuntas intercepciones telefónicas por la prensa es ilegal y carece de relevancia penal.
Por su parte, los magistrados de la fiscalía de Trani, en el sur de Italia, rechazaron hablar con los medios de comunicación sobre ese tema.
